SANTIAGO.- Luego de que el periodista Iván Núñez revelara que el economista con una orden de captura internacional en su contra,
Rafael Garay, va a ser padre -de ahí su extrañeza a la solicitud de un
certificado de soltería en Rumania- hoy se conocieron más detalles al respecto.
Según revela
El Mercurio, el profesional que
pasó de desaparecido a prófugo de la justicia, sabía que su polola estaba esperando un hijo y quiso dejarle un testamento.
Esto se lo expresó a su ahora
ex abogado Ángel Valencia, quien considerando lo avanzado del cáncer cerebral que dijo tener Garay, " le planteó que para ello debía hacerse un examen médico donde constatara que estaba con sus facultades mentales normales".
"Sin embargo, Garay no accedió a la petición, según relatan quienes conocieron los hechos", explica el diario.
Este antecedente aparece en medio de lo declarado por el fiscal José Morales quien al pedir la solicitud de detención al juez Ponciano Sallés del Séptimo Juzgado de Garantía,
cuestionó la existencia del glioblastoma alojado cerca del cerebelo que dijo tener Garay.
"Considerando que el imputado ha señalado públicamente que está aquejado de un cáncer, pero que no hay datos de la efectividad de lo anterior, es posible que su enfermedad haya sido utilizada como parte del engaño para mantener el negocio y no restituir los dineros administrados", dijo refiriéndose a las
querellas y denuncias por presunta estafa que hoy pesan sobre el empresario.
Además, según informó Radio Bío-Bío, la polola embarazada de Garay, quien es además enfermera de la Unidad de Oncología de un hospital de niños, se acercó voluntariamente a declarar a la PDI donde señaló que "nunca pudo establecer la existencia de la enfermedad".
