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Relación normal con Piñera y dudas sobre su apertura: La mirada chilena ante la Cuba de Díaz-Canel

El ex embajador de Chile en La Habana, Gabriel Gaspar, y el senador Felipe Kast (Evópoli), ambos con estrechos vínculos con la isla, compartieron con Emol sus perspectivas ante el fin de la era de los Castro.

22 de Abril de 2018 | 07:00 | Por Felipe Vargas, Emol
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Miguel Díaz-Canel recibió ayer el respaldo del parlamento cubano para suceder a Raúl Castro al mando de Cuba.

AP
SANTIAGO.- Este jueves, el ex primer vicepresidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, se convirtió en el nuevo Presidente de la isla, poniendo fin de ese modo a 59 años de gobierno de los Castro, primero con Fidel, el eterno líder de la revolución cubana, y luego con Raúl, quien dejó el puesto tras doce años de administración.

Se trata del fin de una era y la llegada de una nueva generación al poder del régimen, lo cual supone la posibilidad de que el nuevo Mandatario pueda ir introduciendo ciertos cambios al modelo, en línea con los avances realizados por su antecesor. Sin embargo, desde la mirada de nuestro país, hay dudas sobre el rol que jugará Díaz-Canel.



Así lo señalaron a Emol dos personajes con importantes vínculos con el país caribeño, como el ex embajador, Gabriel Gaspar, y el senador de Evópoli, Felipe Kast. El primero, fue representante de Chile en La Habana y el segundo estudió en esa ciudad, se casó con una cubana y mantiene familia en la isla.

Según el diplomático, el cambio de mando de Castro a Canel-Díaz "era un hecho esperado y se va a desenvolver en los márgenes de una relativa normalidad, no va a tener nada disruptivo. Se cierra un ciclo eso sí de la historia de Cuba, pero también en la de América Latina, que estuvo marcado por la guerra fría".

"Hay una nueva Cuba, un nuevo panorama mundial y mi opinión es que lo más importante son los desafíos que va a tener la nueva dirección: Estos van a estar en el ámbito económico y social más que en el político, porque la mayoría de la sociedad cubana a estas alturas requiere acceder a los beneficios del desarrollo y el avance tecnológico", añadió.

En tanto, el parlamentario sostuvo que "simplemente hay un cambio de persona, pero estamos lejos de lograr un cambio sustantivo en materia económica, de libertades civiles. Sigue siendo un país donde no existe el respeto a los DD.HH., no existen garantías a la diversidad de opiniones, no existe posibilidad de armar un partido político distinto".

"Por lo tanto, la verdad es que no se ven muchas esperanzas por el momento con este cambio de nombre en la isla. Ojalá que me equivoque, pero por el momento es simplemente un paso más en una estructura interna que ha perpetuado la vulneración de los DD.HH", recalcó Kast.


Una visión más matizada posee Gaspar, quien comentó que "lo que si es cierto y es nuevo en Cuba es que dada la apertura que hubo en el sector del turismo emergió una situación de doble moneda en Cuba, el peso cubano y el peso cubano convertible (CUC) y la capacidad de consumo que se adquiere con una es brutalmente diferente que con la otra".

"Entonces, hay dos economías y dos sociedades y lo que veo es que hoy en Cuba después de 50 años se ha empezado a instalar una desigualdad social respecto a los que tienen CUC y los que no. Eso genera un fenómeno nuevo en Cuba, que era una sociedad bastante homogénea e igualitaria. El nuevo Gobierno tendrá que enfrentar esta situación", indicó.

Los cambios en la isla y la relación con Chile


El ex embajador añade que "Cuba se ha ido abriendo con Raúl y esta apertura ha generado que el sector que se ha ido abriendo tenga que funcionar con una moneda competitiva como el CUC", pero enfatiza que "es probable que haya mucha desafección con el sistema económico por parte de la población, uno lo escucha, no hay un secretismo en eso".

No obstante el senador de Evópoli recalca que "no hemos visto ninguna apertura de ningún tipo. De hecho, al contrario, hemos visto que las persecuciones a los presos políticos continúan igual que siempre. Lo que tiene que ver con las libertades civiles hay cero avance y lo que tiene que ver con la posibilidad de emprender tampoco".

En cuanto a la relación que el Gobierno tendrá con la nueva administración, Kast recordó que el Presidente Sebastián Piñera "siempre mantiene una relación cordial y diplomática, pero al mismo tiempo muy firme en materia de defensa de los DD.HH. y en esa materia Chile debiera ser especialmente sensible".

"Acá estamos hablando de una dictadura que ya va a llegar a los 60 años y, por lo tanto, veo que el gobierno chileno en esta materia no puede tener dos voces y estoy muy confiado de que tanto el canciller Roberto Ampuero como el Presidente Piñera no se van a confundir en esta materia", indicó.


Mientras, Gaspar recordó que "en Cuba, y me lo dijeron distintas autoridades, guardan muy buena experiencia del primer gobierno de Piñera, porque en ese momento tuvieron un trato mutuamente respetuoso, sobre todo en la Celac, donde ambas cancillerías trabajaron estrechamente. Por ello, las relaciones debieran ser normales".

Sin embargo, advirtió que "la relación Chile-Cuba es bastante tenue en muchos aspectos, de baja intensidad comercial, de inversiones e intercambios, pero de una lata explosividad comunicacional y en algunos casos, el tema Cuba se usa como un tema de la agenda interna. Pero el nivel de impacto de la relación es bajo".

Finalmente, sobre la visión que tienen de Díaz-Canel, el legislador comentó que "sabemos que es una persona de su círculo más cercano, por lo tanto, de alguna manera Castro está dejando a su delfín en las riendas del poder y por lo tanto no creo que tengamos ningún cambio sustantivo".

El ex embajador, por otro lado, indicó que "no lo conozco mucho, salvo un par de veces que lo he saludado. Conforme a las prácticas de un régimen como el cubano, que es muy monolítico y hermético, solo hablan por boca de sus máximas autoridades y no me ha tocado compartir con él".
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