SANTIAGO.- A partir de este jueves cerca de 14 millones de chilenos se encontrarán en cuarentena a lo largo del país, esto como parte de las medidas tomadas por las autoridades con el fin de frenar los contagios de covid-19, cuyo peak se ha registrado esta semana al superarse el máximo de casos activos alcanzados en junio del año pasado.
En medio de este panorama y pese al exitoso proceso de vacunación, las críticas a la gestión del Gobierno no han estado ausentes.
Es que mientras crecen el número de casos también van apareciendo diferentes cuestionamientos al Ejecutivo, algo similar a lo que se vivió el año pasado en los meses más álgidos de la pandemia, pero que se aplacaron con el cambio entre Jaime Mañalich y Enrique Paris, al mando de la cartera de Salud.
Una de las más reciente polémicas fue la que se vivió con la presidenta del Colegio Médico, Izkia Siches, quien la semana pasada realizó una dura crítica al Gobierno e incluso tildó de "infelices" a algunos de sus personeros, dichos que causaron molestia en el oficialismo y por los que el martes la involucrada pidió disculpas, reconociendo de paso el "error en la elección de las palabras empleadas". No obstante, expresó que "las promesas incumplidas y la falta de atención a nuestros planteamientos pueden haberme llevado a desatender la forma de mis expresiones".
Otro caso es el del alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, quien criticó el pasado de la comuna a cuarentena, a diferencia de la suerte que corrieron en ese minuto sus vecinos como Viña del Mar. El también candidato a la reelección afirmó entonces que "todos los expertos de la región han dicho más o menos lo mismo: no se justifica esta decisión de desintegrar una zona El número de viajes entre ambas ciudades es gigantesco, somos comunas que vivimos interrelacionadamente. Es una decisión poco coherente, que no es integral y es poco transparente".
Sumado a esto, los anuncios hechos el lunes por el Presidente Sebastián Piñera sobre nuevas ayudas sociales, no lograron acallar las voces oficialistas que pedían mayores medidas para las personas ante el recrudecimiento de la pandemia.
Pero pese a los nuevos anuncios de La Moneda, desde el sector han cuestionado la "letra chica" de las iniciativas y abogado, por ejemplo, por bonos universales y permitir el retiro de fondos del Seguro de Cesantía. Propuestas que al interior de Palacio atribuyen a tiempos de campaña electoral. Mientras que la oposición insiste en el tercer retiro de los fondos de las AFP.
¿Aumento de contagios y de críticas?
Pero, ¿a qué atribuir este ambiente de polarización y lo que está ocurriendo? Según el académico de la Universidad de Talca, Mauricio Morales, "el Gobierno ha mantenido niveles de aprobación cercanos al 20% aunque con algunas variaciones menores. Por ejemplo, al inicio de la pandemia y cuando partió el proceso de vacunación. Por tanto, no parece existir una relación directa entre las variaciones de los casos y el apoyo al Gobierno. Eso, al menos, en la opinión pública. A nivel de líderes políticos o gremiales, esa relación tampoco se advierte. Las críticas de la oposición al Gobierno han sido sistemáticas más allá del número de casos diarios, especialmente por la ayuda económica a los sectores más desprotegidos".
"Pareciese que existe una batalla de suma cero entre la oposición y el manejo del Gobierno de la pandemia. Cuando existen mejoras, un silencio casi absoluto recorre las filas de los opositores a esta administración o bien se desvía la atención a una arista específica que se encuentra fuera de la administración Piñera. Mientras que cuando la situación es más compleja, como la que vivimos hoy, pareciese que todo se ha hecho mal en el tiempo. Ninguna de las dos alternativas es correcta, como en todo evento sin precedentes, el Gobierno ha tenido buenos aciertos y errores, lo inusual y compleja de la situación de enfrentar un virus de estas características en un mundo conectado no tiene comparación histórica, y tener ello en cuenta sería muestra de prudencia política para evitar esta suerte de correlación entre críticas y aumento de casos", opinó el docente de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo, Miguel Ángel Fernández.
Por su parte, el jefe del comité de senadores UDI, Juan Antonio Coloma, planteó que "me parece que es urgente apoyar al Gobierno frente la pandemia y no buscar distintas excusas para inhibir ese apoyo, el mundo está viviendo momentos muy dramáticos, a través de todos los informes epidemiológicos, creo que Chile lo está viviendo también a pesar del gigantesco esfuerzo en materia de vacunas (...) aquí es donde uno hecha de menos esa voluntad conjunta de enfrentar los temas unidos, la misma lógica que se ha tenido en materia de terremotos e inundaciones, a rato echo de menos esa voluntad".
Un ambiente polarizado
Asimismo, el subjefe de la bancada de diputados RN, Andrés Longton, consideró que "obviamente que estamos en un año electoral, entonces lo electoral empieza a chocar con las políticas sociales o las políticas públicas que quiere implementar el Gobierno, va a haber un contraste mayor en la medida que la oposición quiera posicionarse electoralmente o tratar de marcar más diferencias con el Gobierno de turno que en este caso es de derecha. Pero a mí me parce que no es el camino, porque estamos justamente en un camino como país que necesita la reconciliación, la unidad".
A su juicio, "lo mínimo es tener un diálogo constructivo, uno puede tener diferencias pero siempre el lenguaje tiene que ser respetuoso (...) cuando uno tiene un lenguaje tan agresivo y de odio, obviamente que se va perdiendo el contenido y las diferencias que pueden haber y uno puede llegar a un punto de no retorno en las relaciones".
"El ambiente no ha sido el más fácil en el ámbito público, pero veo que hoy se ha ido acentuando, obviamente una de las acciones en que los ambientes electorales contribuyan a ello, es de una pequeñez muy profunda, porque este es el momento de los gestos grande. La gente entiende que no es que un gobierno salga solo adelante, aquí salimos todos o no sale nadie", apuntó el senador Coloma.
Para Morales, "la polarización política producto de la pandemia convive con la polarización política derivada del contexto electoral. Sin embargo, durante la gestión de Mañalich también hubo altos niveles de polarización que respondieron, en parte, a la personalidad del ministro. En síntesis, el país ha convivido con un estrés de polarización que va más allá de la pandemia y que arrancó con fuerza luego del reventón social de octubre. Si bien el proceso de vacunación ha sido exitoso, la proximidad de las elecciones impide que oposición y Gobierno estén permanentemente de la mano celebrando dicho éxito".
En tanto, Fernández planteó que "el ambiente en la élite política está polarizado hace ya algún tiempo. El ambiente que observamos desde la oposición durante esta pandemia es fruto de dicho proceso de división profunda que se vive entre quienes nos representan. Pareciese impensado hoy darle crédito al Gobierno por algo como su gestión en las vacunas, y algunos sectores prefieren aplaudir casi exclusivamente al sistema primario por sobre lo que ha realizado la administración Piñera en dicha materia".
