"Resultados positivos", pero llamado a la cautela
"Considero que estos resultados, si bien son preliminares y hay que recibirlos con cautela, son positivos, ya que informan que la aplicación de una vacuna contra el covid-19 se está traduciendo en una reducción de los casos sintomáticos y los ingresos hospitalarios y requerimientos de cuidado intensivo", señala el doctor Alexis Kalergis, bioquímico de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
En tanto, el
doctor Miguel O'Ryan, profesor titular en el Programa de Microbiología y Micología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, plantea que "desde la mirada científica-académica, los resultados están dentro de lo que uno hubiese esperado de los ensayos clínicos controlados". No obstante, plantea que resulta llamativo que "la efectividad haya sido un poquito más alta que la eficacia desde el estudio, pero bien".
Lo mismo para la efectividad contra los cuadros graves, "que es de un 85%, y están justo, más o menos, donde uno pensaba, es lo que los estudios de eficacia habían evaluado".
La diferencia entre efectividad y eficacia, según explicó ayer Araos, es que la primera la podemos considerar "como la protección que nos entrega una vacuna en condiciones de vida real, en contraste a la eficacia, que se evalúa en estudios clínicos".
"Viendo el vaso medio lleno, estoy contento porque disponemos de la vacuna que ha mostrado ser efectiva para combatir el covid-19, en cuanto a hospitalizaciones y muertes. A todos nos hubiera gustado que la vacuna mostrara mejores números de efectividad, pero las cifras alcanzadas, hablan de una vacuna que está cumpliendo bien con su tarea", indica el doctor Jaime Cerda, miembro del Comité Asesor de Vacunas e Inmunizaciones (CAVEI).
Las mediciones de mortalidad
El aspecto de la mortalidad, que el estudio cifró en un 80% su prevención con la aplicación de CoronaVac, efectivamente es, para los expertos, un tema que se debe analizar con más detalle.
Ese alcance también lo hizo el doctor Araos, quien explicó que por tratarse de un "evento tardío" los datos de los decesos se podrán analizar con mayor exactitud cuando pase más tiempo.
"Sin ver los datos más finos para saber cómo se hizo ese cálculo, es difícil saber por qué la protección contra mortalidad eventualmente no fue mayor que contra UCI (...) hay que tener más números para poder ir afinando cuál va a ser la efectividad al cabo de mayor tiempo".
Doctor Miguel O'Ryan
"
Sabemos que la gente que fallece por covid-19 lo hace, en general, bastante tardíamente. Es una combinación, pues algunos fallecen en el hospital y otros fuera de éste", complementa O'Ryan.
Por eso, "sin ver los datos más finos para ver cómo se hizo ese cálculo, es difícil saber por qué la protección contra mortalidad eventualmente no fue mayor que contra hospitalizaciones UCI. Hay que ser cauteloso, porque si uno ve los rangos de confianza, éstos se superponen entre sí, de tal manera que hay que tener más números para poder ir afinando cuál va a ser la efectividad al cabo de mayor tiempo".
Dudas sobre las variantes
Cómo se abordarán las variantes y qué implicancia tendrán en próximos resultados de efectividad, serán claves para continuar avanzando con estas investigaciones, debido a que aún quedan dudas en cómo se comportaran en cuanto a hospitalizaciones y muertes, aquellas que ya circulan en el país, como la británica (B117), brasileña (P1), y la recién llegada, sudafricana, entre otras.
En este punto, el doctor Kalergis recuerda que los datos de efectividad reportados en nuestra población
resultan de los casos de covid-19 producidos por el virus circulante en Chile. "Esto indica que la protección que está generando la vacuna y que se traduce en los valores de efectividad reportados, tendría que ver con la capacidad de la inmunidad inducida por la vacuna de prevenir, aunque sea parcialmente, la infección causada por las variantes que circulan en nuestro país".
"Sin embargo, para poder responder a ciencia cierta este punto, sería necesario conocer qué variante fue la más predominante en el periodo en que se reportaron los casos incluidos en el análisis. Esto requiere datos genómicos y de secuenciación de los que no disponemos aún. Por lo tanto, es importante fortalecer el seguimiento genómico del virus, para poder conocer la distribución porcentual de las variantes que están actualmente en Chile", complementa.
Para el doctor O'Ryan, el llamado es a "dimensionar adecuadamente el tema de las variantes". Esto, porque a su juicio se ha "hablado mucho de ellas sin tener evidencia ni datos; primero, de cuáles es su rol real que tienen la circulación en Chile hoy. El último dato que yo vi, es que no representaban más del 20% en Chile, pero eso puede cambiar; y, segundo, que tampoco hay claridad si esas variantes se van a asociar a un cuadro de mayor severidad o no".
Aquí, recuerda los recientes preprints liberados, respecto a estudios en Brasil donde la vacuna de Sinovac protegería sobre la variante P1, "lo que también es una buena noticia", agrega el experto.
Los datos "pendientes" a revisar
Según anunció la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, se liberará mensualmente nuevos estudios respecto a la efectividad. La pregunta entonces es qué puntos quedaron pendientes, y de los cuales se requerirá mayor información.
El doctor Kalergis plantea que "sería positivo e interesante que se pudiera ir conociendo la información por rango etario y de acuerdo al género", y tal como lo señaló antes, "conocer cuál es la variante que circula predominantemente al momento de que se reportaron los casos positivos para covid-19 que se incluyen en cada análisis, para tener datos que permitan evaluar la capacidad de la vacuna de proteger contra diversas variantes".
Otra sugerencia del experto es "incluir un análisis de cuánto tiempo después de la vacunación se reportan los casos de covid-19 en estos individuos, información que podría aportar antecedentes sobre la duración de la inmunidad protectora producida por la vacuna".