El Dr. O'Ryan dijon esperar que "ya con alta población chilena vacunadas, hacia agosto-septiembre empecemos a ver claramente una luz muy potente" en el control de la pandemia.
El Mercurio (Foto de Archivo)
SANTIAGO.- ¿Por qué hay tantos casos si la vacunación está avanzando?, ¿Sería distinto si estuviéramos usando otra vacuna? El Dr. Miguel O'Ryan, infectólogo de la Universidad de Chile, es enfático en señalar que contar con la fórmula de Sinovac para inocular masivamente a la población del país ha permitido evitar un escenario mucho peor.
"En Chile la vacunación masiva ha sido con Sinovac, y hay que ser muy claro: Si no fuera así, no tendríamos el porcentaje de la población vacunada que tenemos. No había alternativa, no era una u otra, es la posibilidad que ha logrado que Chile –y esto hay que decirlo con todas sus letras– esté en el top 5 mundial de vacunación", sostuvo el experto, en Radio Cooperativa.
Enfatizó que eso "está teniendo un impacto evidente en la curva epidémica en nuestro país". "Basta mirar el resto del continente; si no fuera por el nivel de vacunación que tenemos, es probable que tuviéramos tasas de infección parecida a las que están teniendo Colombia, Argentina, que superan en 2 a 3 veces el número de casos que estamos teniendo nosotros en este momento por habitante. Y ése es un efecto fundamental de la vacunación", afirmó.
"El objetivo en junio y julio –que es donde sabemos que va a ser el periodo más crítico de la pandemia que nos va a tocar vivir– es lograr cortar al máximo nivel posible el ascenso de casos, con el máximo de población vacunada lo más rápidamente posible, de tal manera de sortear un invierno con un incremento de casos que sin vacuna podría haber llegado perfectamente a 25 mil"
Dr. Miguel O'Ryan, infectólogo U. de Chile
Respecto de lo que viene, el experto señaló que –considerando el porcentaje de la población vacunada y el nivel de protección de la fórmula que estamos usando–, "el objetivo en junio y julio –que es donde sabemos que va a ser el periodo más crítico de la pandemia que nos va a tocar vivir– es lograr cortar al máximo nivel posible el ascenso de casos, con el máximo de población vacunada lo más rápidamente posible, de tal manera de sortear un invierno con un incremento de casos que sin vacuna podría haber llegado perfectamente a 25 mil –que es tres veces lo que tuvimos en el peak del primer año, que es lo que se vio en muchos países de Europa–, pero que con vacunación esperemos que llegue a la cifra que estamos viendo ahora, en algún lugar entre 8 mil, 9 mil y 10 mil" casos diarios.
Comentó que luego de esos meses críticos debiera empezar una caída durante la primavera y verano, como ha ocurrido en los países del hemisferio norte, "y que ya con alta población chilena vacunada, hacia agosto-septiembre empecemos a ver ya claramente una luz muy potente; no el final de la pandemia, pero con una pandemia entrando ya en un control muy significativo".
"En esto uno no puede perderse; el que nos estemos vacunando todos como país es el gran camino que tenemos. Las vacunas no son perfectas, puede haber alguna más (eficaz) que otra, pero no está disponible, y las vacunas que están disponibles y que estamos usando –aprobada ahora por la OMS– como una vacuna muy estratégica para el control de la pandemia, es la que toda la población debe estar disponible a recibir lo antes posible", subrayó.
