Una compleja relación es la que ha mantenido el candidato presidencial de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, con la Democracia Cristiana (DC), partido del cual espera su respaldo de cara a la segunda vuelta del 19 de diciembre, con miras a vencer a su contendor del Frente Social Cristiano, José Antonio Kast.
Su visión crítica sobre el rol que ha jugado el partido en la historia no se remonta solo a los últimos años o desde que arribó a la política institucional en 2014 cuando asumió como diputado, sino que viene de mucho más atrás, incluso de cuando debatía con su padre, un connotado militante DC en Magallanes, las decisiones de la colectividad.
Un ejemplo de la visión de Boric sobre la falange quedó patente en la columna que escribió tras la muerte del
ex Presidente Patricio Aylwin en abril de 2016. En ese texto, el hoy abanderado sostuvo que si tuviera que definir en una sola palabra a una de las principales figuras DC, "diría que fue un personaje contradictorio".
"Contradictorio porque promovió el golpe de Estado del 11 de septiembre y una vez consumado este lo justificó sin ambages, como también fue promotor de la recuperación de la democracia una vez consolidada la dictadura, más extensa y más brutal de lo que cualquiera se hubiera imaginado en los tensos días de 1973", indicó.
En el texto, el parlamentario criticó a los gobiernos de la Concertación y explicó por qué no se sumaba a los homenajes al ex Mandatario, lo cual le valió un reproche de parte de su padre, tal como él mismo reveló tras la publicación de la misiva, quien le indicó que su postura era "decepcionante".
Si nos remontamos a estos días, la distancia entre ambas partes es patente. Para buena parte de la DC, Boric representa a una izquierda marxista con la cual no quieren comulgar. Así lo dejó en claro el ex presidente de la tienda, Ignacio Walker, quien sostuvo que preferiría votar nulo para no respaldar al legislador.
Las dudas quedaron en evidencia el mismo domingo, luego de que la propia candidata presidencial DC, Yasna Provoste, no endosara inmediatamente su apoyo a Boric de cara al balotaje.
"Vamos a ser oposición a su gobierno", dijo, aunque ayer terminó entregando su respaldo al frenteamplista.
En la campaña de primera vuelta, la senadora también cuestionó al representante por Magallanes por su alianza con el PC, destacando que "el partido más poderoso que apoya al candidato de la extrema izquierda no cree en el apoyo irrestricto a los derechos humanos", en medio de la polémica por Venezuela, Cuba y Nicaragua.
La estrategia de diferenciación que impulsó la ex abanderada en las últimas semanas marcó aún más las distancias con el líder del FA, llegando incluso a emplazarlo a acelerar la entrega de los resultados de su PCR por covid-19, lo cual fue resentido por el diputado.
A su regreso a la Cámara tras superar el contagio, Boric fue enfático en repasar a la DC y su postura frente al cuarto retiro del 10% de los fondos de pensiones. "La DC tiene en su historial que ha sido un elemento y factor que torpedea los cambios y transformaciones", comentó.
Asimismo, recordó que dicha conducta quedó en evidencia tras el “torpedeo” de la DC al programa de gobierno de Michelle Bachelet, sobre todo en materia de educación. "Ellos dijeron que no se habían leído el programa. Entonces a mí esa cuestión me parece que es no hablar con la verdad", indicó hace unas semanas.
Otros encontrones
Si nos vamos a años anteriores, Boric tuvo varios choques con posturas de la DC. Por ejemplo, en mayo de 2016, se enfrentó al partido tras la aprobación del ex diputado falangista Eduardo Saffirio como nuevo consejero del INDH, el cual fue aprobado en la Cámara por 90 votos a favor, 8 abstenciones y un voto en contra: El suyo.
En ese momento, el líder del Movimiento Autonomista, cuestionó en el hemiciclo que "nos dicen que este es un cupo de la DC, ¿qué es esto? Me parece inaceptable y es bien absurdo que no se den cuenta de que este tipo de cuoteos es una de las cosas que desprestigian a la política".
En 2019, en tanto, lamentó la estrategia asumida por la dirigencia DC encabezada por
Fuad Chahín de sentarse a conversar con el Gobierno de Sebastián Piñera para sacar adelante la agenda del Ejecutivo, lo cual se vio refrendado tras el apoyo del partido a la idea de legislar la reforma previsional del Mandatario.
En ese momento, Boric señaló que "la Democracia Cristiana no entendió bien ni el acuerdo que habíamos llegado como oposición, ni al que llegó con el Gobierno. Y eso es uno de los principales problemas que tiene la DC hoy día, que está permanentemente explicando qué es lo que hace".
"Ellos van a negociar por su cuenta, dejando de lado el trabajo que hicimos en conjunto como oposición, para justamente adquirir este protagonismo", cuestionó, aunque luego advirtió que "con la DC evidentemente tenemos muchas diferencias, pero también hay espacios que podemos trabajar en común".
"A la hora de los qué hubo, la DC al final prefiere negociar por sí misma, sola ante el Gobierno, que mantener la unidad de la oposición en esto", añadió, y los llamó a "reflexionar si es que quieren tener una articulación con el resto de la oposición o seguir una vía solitaria, que ya saben cómo les fue en la última elección presidencial".
