Hannah llegó al Hospital Real de Salford con graves heridas, al ser atropellado por un vehículo.
Captura Daily Mail
SANTIAGO.- El uso "involuntario del líquido incorrecto en los pulmones del paciente, fue causado por una serie de factores humanos", indica un informe de un hospital británico, sobre una grave negligencia hacia un paciente al que en vez de limpiar sus pulmones con una solución salina, se le introdujo detergente utilizado para esterilizar equipo médico.
El error ha sido informado por la prensa británica en los últimos días, mientras se está investigando el caso. Pero sucedió en septiembre del año pasado, cuando William Hannah, de 68 años, ingresó de urgencia al Hospital Real de Salford (al oeste de Mánchester, Reino Unido), tras haber sido atropellado por un automóvil.
La situación del paciente -múltiples fracturas y un traumatismo craneoencefálico- obligaron a los médicos a trasladarlo a la UCI del establecimiento, y conectarlo a un ventilador artificial.
La salud de Hannah iba en deterioro cuando desarrolló una infección pulmonar, y se decidió realizar una
broncoscopia, introduciendo un dispositivo por las vías aéreas para visualizar el interior de estas. Tal como indica la Biblioteca Nacional de Estados Unidos sobre este procedimiento,
en determinados casos se puede requerir que se utilice una solución salina para lavar los pulmones y "recoger muestras de células pulmonares, líquidos, microbios y otros materiales".
Pero en el caso de Hannah, en vez de la solución salina, se introdujo una mezcla de detergente.
La investigación interna del hospital señala que personal médico solo se dio cuenta de lo que había pasado cuando concluyó el segundo "lavado completo del pulmón derecho", y que el incidente se debió a diversos "factores humanos" como un carro sin inventario, distracción y falta de comunicación del personal, además del mal etiquetado de las botellas de solución salina y de detergente, entre otros.
Las autoridades del establecimiento indican que se desconoce si la muerte de Hannah, ocurrida 33 horas después de la negligencia, se debió directamente a esta.
El sexagenario falleció el 16 de septiembre tras presentar síntomas de sepsis y un colapso cardiovascular.
"Se supone que este es un hospital excepcional, pero fue un error espantoso e increíble", dijo la hija de Hannah, Lisa (44), a la prensa británica, según indicó BBC.
"Nuestro padre no merecía que le pasara esto y es por eso que estamos tratando de asegurar que ninguna otra familia sufra como lo hemos hecho nosotros", agregó, indicando que han solicitado los servicios de abogados para “investigar más a fondo" lo ocurrido.
