HOUSTON.- La celebración de la Navidad ofreció la programación de tres partidos de liga que tuvieron como grandes protagonistas a los Kings de Sacramento, Nets de New Jersey y Magic de Orlando, con su jugador estrella Tracy McGrady, que regresó de una lesión y anotó 46 puntos.
Los tres equipos y McGrady, en el apartado individual, acapararon la atención con actuaciones que dejaron a sus respectivos rivales de Los Angeles Lakers, Celtics de Boston y Pistons de Detroit en el lado de los perdedores.
Pero si hubo un perdedor que sufrió la mayor humillación de la jornada fueron los actuales tricampeones de liga, los Lakers, que recibieron por parte de los Kings una lección de baloncesto de equipo en su campo del Staples Center, donde cayeron derrotados 105-99, en la revancha de las pasadas finales de la NBA.
La imagen que ambos equipos dieron en el campo mostró todo lo contrario, los Kings reaccionaron en los momentos decisivos y sentenciaron en la recta final como si fuesen los campeones, que en está ocasión, con el estreno de nuevo uniforme -blanco y franja lateral amarilla- terminaron siendo un equipo fantasma.
Predrag Stojakovic y Chris Webber encabezaron el ataque de los Kings, que tuvo un 46 por ciento de acierto en los tiros de campo por 36 para los Lakers, que perdieron el cuarto partido de los últimos cinco que han disputado.
Webber consiguió 25 puntos (9 de 22 tiros de campo y 7 de 8 desde la línea de personal), capturó 15 rebotes, dio seis asistencias, tuvo una recuperación de balón y lo perdió una vez, en el partido que habían esperado por meses para alcanzar la victoria que tanto deseaban.
Los jugadores de los Kings admitieron que el partido de revancha con los Lakers no era lo mismo que el de una final de la NBA, pero si tuvo el mismo ambiente y unos efectos de gran utilidad de cara al futuro.
Stojakovic fue el máximo encestador de los Kings con 26 puntos y cinco rebotes para ser el jugador que estableció la gran diferencia en el ataque del equipo de Sacramento, que tuvo al base Mike Bibby con 14 tantos y al reserva Bobby Jackson con 11, antes de fracturarse la mano izquierda, que le golpeó el pívot Shaquille O’Neal.
Los Lakers, que llegaron a tener hasta 12 puntos de ventaja al comienzo del tercer período, a partir de los últimos minutos se vinieron abajo, cuando O’Neal y el escolta Kobe Bryant no pudieron superar la defensa y el ataque de los Kings, que lograron una racha de 17-4.
El entrenador Phil Jackson mostró un partido más que no tiene soluciones inmediatas para la grave crisis que sufren los Lakers como equipo, que bajó su marca a 11-19, la peor de toda su historia para un comienzo de temporada, y alejados 11 triunfos y medio de los Kings (23-8), líderes de la División del Pacífico.
O’Neal y Bryant, que anotaron 27 puntos cada uno y tuvieron 17 y 15 rebotes, respectivamente, al final no pudieron aguantar el ritmo impuesto por la defensa de los Kings, y también fallaron con sólo cuatro canastas de 20 tiros de campo en la segunda parte.
El base Derek Fisher con 15 puntos fue el tercer jugador de los Lakers que superó la barrera de los 10.
El duelo entre Doug Christie y Rick Fox -ambos se agredieron en un partido de pretemporada- pasó desapercibido porque ambos jugadores tuvieron siempre bajo control sus emociones.
Christie hizo una gran defensa sobre Bryant con seis robos de balón, anotó nueve puntos, dio cuatro asistencias y capturó dos rebotes para los Kings, que reivindicaron ser los mejores de la división y le recordaron a O’Neal que la capital de California está en Sacramento y también el mejor equipo de baloncesto.
Fox se quedó con cinco tantos y atrapó siete balones bajo los aros para los Lakers, que el año pasado habían ganado tres de los cuatro partidos de la temporada regular contra los Kings, incluidos los dos que jugaron en el Staples Center.
McGrady encestó 46 puntos, decimoquinto partido profesional con 40 o más, cuarto en lo que va de la nueva temporada, y los Magic (16-14) vencieron 104-99 a los Pistons.
Los 46 puntos también le permitieron a McGrady superar la marca de 45 que estableció Bernard King para un partido disputado en el Día de Navidad.
McGrady jugó por primera vez después de haberse perdido cuatro partidos con una lesión en la parte baja de la espalda, de la que todavía no está completamente recuperado.
Richard Hamilton anotó 22 puntos para encabezar el ataque de los Pistons, que tuvieron a seis jugadores con 10 o más, pero perdieron el segundo partido consecutivo para bajar su marca a 18-9, la segunda mejor en la División Central.
Los Nets, en la nueva rivalidad que ha nacido en la Conferencia Este con los Celtics, barrieron a sus rivales por paliza de 117-81, en un partido carente de calidad técnica y emoción.
Los Celtics (18-10) no se pudieron vengar de la derrota en las pasadas finales de la Conferencia Este porque los Nets siempre dominaron con una ventaja que en la segunda parte fue de 38 puntos.
Richard Jefferson lideró el ataque de los Nets (20-9) al conseguir 22 puntos, el reserva Lucious Harris aportó 17 y Jason Kidd contribuyó con 16 tantos y 13 asistencias para dejar al equipo con marca de 11 triunfos consecutivos en su campo.
Paul Pierce, con 27 puntos, y el alero Antoine Walker, con 21, fueron los máximos encestadores para los Celtics, que sólo tuvieron un 32 por ciento en los tiros de campo, comparado al 54 de los Nets, que jugaron por primera vez en el Día de Navidad desde 1984 cuando también ganaron a los Knicks de Nueva York.
Los Celtics habían ganado cuatro partidos consecutivos en Nueva Jersey, donde no perdían desde el 8 de febrero del 2000 y el ala-pívot argentino Rubén Wolkowyski jugó siete minutos con el equipo de Boston sin anotación y dio una asistencia.
