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Ignacio Casale, el duro recuerdo que marcó la carrera del primer campeón chileno del Dakar

A dos meses del título más importante de su vida, el piloto nacional repasa sus inicios y el accidente fatal de su amigo Gino Bianchi que lo tuvo al borde de retirarse del motociclismo.

09 de Marzo de 2014 | 13:14 | Por Ítalo Morales Salinas, Emol

SANTIAGO.- A casi dos meses de haberse convertido en el primer chileno campeón del Dakar en quads, Ignacio Casale, reconoce que aún no dimensiona bien lo que pasó. Sin embargo, ya piensa en lo que viene para el 2014, sin olvidar el inicio de un camino que estuvo a punto de no existir.

Es una mañana soleada, es Santiago, y el motociclista aparece vestido como si el escenario fuera el desierto y no una automotora pérdida en la ciudad. Casale tiene el rostro más pálido y la mirada mucho menos cansada que hace dos meses y de cerca vuelve a ser un joven 26 años más y no un campeón del rally más importante del mundo.

"Aún no dimensiono bien lo que logré. Ha sido bastante brusco, bonito. Estoy viviendo un minuto feliz en mi vida. Estamos haciendo las cosas bien. Que la gente te reconozca por tus logros, ha sido un privilegio", comenta a Emol.

¿Dónde estaba Ignacio Casale hace dos meses? En Valparaiso, sobre un podio en la Plaza Sotomayor. Entre miles de personas, de frente a cientos de camarográfos que le sacan tantas fotos como sus dedos lo permiten. Diciéndole al mundo lo que el mundo ya sabía: que el había sido el mejor. Sin embargo, la mente del campeón parecía no estar ahí.

En la cabeza de Casale era 2011 y él uno más dentro del competitivo escenario del motociclismo nacional. Era la segunda etapa del Rally Desafío del Desierto, era la que unía Iquique con Antofagasta, era el desierto que él junto a su amigo Gino Bianchi habían recorrido tantas veces.

"Yo vi cuando él se cayó", recuerda Casale, "Gino quedó inconsciente pero no pensé que fuese grave. A él siempre le pasaba eso y lo ayudé a subir a la ambulancia. Dije lo voy a llamar más tarde para ver cómo se siente".

Pero ese llamado nunca tuvo respuesta. El accidente no era como los otros y Bianchi había quedado con muerte cerebral. Días más tarde Casale fue parte de las 300 personas que estuvieron presentes en Copiapo para despedir al joven de 23 años, al "caballo loco" como le decía de cariño.

"De ahí en adelante muchos compañeros se retiraron. Yo también pensé en retirarme. Dije éste es mi último Dakar por Gino, porque gracias a él yo corrí ese. Cuando falleció al padre le regalaron una inscripción del Gobierno de 20 mil dólares y como éramos tan cercanos me la regaló a mí. Por eso le tengo tanto cariño a él, a su familia y a Copiapó. Es una historia muy bonita que nos une, porque yo creo que sin su ayuda no estaría aquí".

El resto de la historia es conocida. Tras dejar las motos, en 2012 fue cuartos en quads, en 2013 segundo y este año los superó a todos. Mientras se acercaba al podio, a la meta, a recibir el premio, la mente del campeón comenzaba a retroceder."Cuando llegué a la meta en él primero que pensé fue en él. En todos los Dakar cuando parto le agradezco a Gino. Es como si fuera arriba de mi moto".

El futuro del campeón del Dakar

Tras los aplausos, los flashes y responder más entrevistas de las que él mismos recuerda Casale se recluyó. "No me he subido a una moto desde el Dakar" afirma, sin embargo poco a poco va tomando forma su nueva temporada.

"Correré todos los Dakar Series, en Argentina, Perú, Paraguay y el de Chile. Son fechas que están seguras desde abril". Sin embargo, la mente ya está en retener la corona, "ahora soy el piloto para el que los demás entrenan para ganarle", afirma.

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