Safertaxi versus Cabify: Diferencias entre aplicaciones móviles para conseguir un taxi

SANTIAGO.- En los últimos años, las aplicaciones móviles han obtenido un auge bastante más importante de lo que cualquiera proyectaría, y que dan solución a los problemas reales y diarios de las personas. Entre éstas figuran Cabify y SaferTaxi, dos empresas de taxis que trabajan con sus clientes a través de las solicitudes que reciben en sus aplicaciones móviles. 

En el caso de Cabify, ésta fue creada por un grupo de jóvenes emprendedores españoles, entre los que se encuentra uno de los fundadores de Tuenti, Adeyemi Ajao, junto a Juan de Antonio. Explican que es la primera start-up en España que pudo reunir a los mejores inversores de Silicon Valley, luego de que éstos conocieran el proyecto.

"Los socios fundadores viajaban por el mundo y se dieron cuenta de lo incómodo que era conseguir un taxi cada vez que llegaban a un país, entender sus tarifas y además, pagar en efectivo. Al mismo tiempo, en las grandes capitales del mundo cada vez es más incómodo tener tu propio auto", relata Agustín Guilisasti, CEO de Cabify en Chile.

Así, crearon esta empresa de servicios de transporte de lujo, que utiliza una aplicación en los smartphones en la que se solicita, mediante la georeferencia -a través del GPS-, un viaje en un automóvil de alta gama (Audi y Mercedes-Benz, entre otros) con atención especializada de un chofer profesional.

"Chile es un país que muestra un gran potencial en servicios de lujo (…) Cabify llega en 2012 a satisfacer la necesidad de un público cautivo que aspira a un servicio Premium", afirma el directivo, quien, además, explica que la inversión inicial de la empresa en Chile rozó los US$ 500 mil en la primera etapa, para la implementación tecnológica de la empresa, sin embargo "no descartamos seguir creciendo en este ítem" señala.

SaferTaxi

En tanto, la aplicación SaferTaxi fue desarrollada por dos egresados de la Escuela de Negocios de Harvard –Clemens Raemy y Jonathan Lo- quienes buscaban pedir un radiotaxi sin tener que llamar.

"Cuando los fundadores salen de Harvard Business School en el verano de 2011 estaban en búsqueda de capital seguro y un lugar donde poner en práctica lo que era hasta el momento solo una idea. Chile, a través del programa Start-up Chile fue el programa perfecto para empezar con la idea. Los creadores de SaferTaxi tuvieron el honor de ser aceptados en la primera generación de esta gran incubadora", asegura Cristóbal Llugany, gerente general de la compañía, quien también cuenta que Kaszek Ventures, Otto Capital y Drapper Associates invirtieron un capital de US$ 4 millones en esta idea, que se sumó a la asistencia aquí en Chile de los fondos de Start-Up.

Así funciona: Apenas el usuario abre la aplicación de SaferTaxi, se pide el automóvil. Luego, el sistema hace una búsqueda de los móviles que están más cerca, primero buscando en un radio de un kilómetro y tras 20 segundos, lo amplía un kilómetro más.

Cuando el sistema encuentra uno, se le envía al cliente el perfil del taxista (nombre, foto, patente del auto y calificación de otros usuarios), para que éste lo acepte o rechace. En caso de aceptar al chofer, un mapa de la misma aplicación indica al usuario por dónde viene el auto. Si se rechaza, el sistema busca otro.

"Después de finalizado cada viaje los pasajeros tienen que calificar su experiencia, SaferTaxi sacará a cualquier conductor que no cumpla con un buen servicio. Así ayudamos a los siguientes usuarios a tomar una decisión informada al elegir su chofer".

En cuanto a las diferencias entre ambas empresas, Guilisasti de Cabify señala que en la empresa "no sentimos que ofrezcamos un servicio similar a la competencia. Cabify vuela con alas propias en un segmento nuevo y donde existe un público cautivo que busca un servicio de excelencia, puntual y con características de lujo".

La empresa de alta gama trabaja con 50 vehículos de marcas lujosas y sus viajes deben tener un valor mínimo de $5.000.

En tanto, SaferTaxi trabaja con mil taxis chilenos asociados a la empresa, y se trabaja con la misma tarifa regulada de un taxi normal (no de radiotaxi), de $250 por la bajada de bandera y entre $100 y $120 por cada 200 metros.

Además, como no trabajan con los mismos valores (en Cabify no hay transacciones monetarias con el conductor, sino que al finalizar el recorrido se procesa el cargo automáticamente a la tarjeta de crédito y se envía un recibo vía e-mail), la diferencia entre las ganancias de 2012 en cada empresa es bastante amplia. Cabify se acercó al US$ 1 millón, mientras que SaferTaxi "no obtuvo ganancias suficientes para ser rentable", según la empresa.

Dentro de los planes para este año, SaferTaxi busca llevar el servicio a otras ciudades. "SaferTaxi, a la fecha, no tiene un modelo de franquicias porque la compañía cree que mantener las operaciones desde adentro garantiza un servicio de nivel, un estándar corporativo en todas las ciudades. Mientras tanto, cualquier taxista de otra cuidad nos puede contactar para ir armando una red en su ciudad", dice Cristóbal Llugany.

En la misma línea, la empresa de lujo Cabify anuncia que "hoy hemos implementado el sistema de pago vía Transbank, lo cual nos permite que nuestros clientes paguen en moneda local, registrando una sola vez sus datos. La idea es poder seguir creciendo en viajes diarios, los cuales hoy llegan a los 40. Además, tenemos planes de expandirnos en el mediano plazo a otras ciudades emblemáticas del país", indica Guilisasti, quien adelanta que en Cabify "creemos que nuestra facturación anual alcanzará los US$ 2 millones, con un crecimiento mensual de un 40%.

Comportamiento de los usuarios de taxis vía smartphones en Chile

Esta semana, Cabify dio a conocer el comportamiento de los usuarios de taxi en Chile, patrocinado por el programa de seguridad vial del Gobierno "Manéjate por la vida", impulsado por la Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito (CONASET), del ministerio de Transporte.

Luego de una investigación de seis meses, los resultados arrojaron, por ejemplo, que son cerca de 70 los kilómetros en promedio que recorre cada taxi en Santiago, de lunes a viernes; mientras que cada pasajero viaja en un taxi 22,27 minutos aproximadamente.

En cuanto a los valores, las carreras tienen un costo promedio de $5.000, y la espera de los usuarios es de entre 7 y 12 minutos. Además, se constató que el 65% de los usuarios son hombres y sólo un 35% mujeres.

Respecto a las zonas más visitadas de la capital por esta última empresa de taxis premium, se encuentran los barrios El Golf, Apoquindo, Vitacura, Providencia, Kennedy, Bellevista, La Dehesa, Ñunoa, entre otros, aunque en el caso de los viajes a regiones, Viña se lleva todas las preferencias con un 35% de las carreras, seguido por Rancagua con un 9%.