Los rebeldes prorrusos se comprometieron a acordonar la zona cubierta por los restos de la aeronave de Malaysia Airlines.
EFE
VIENA.- Dirigentes de los separatistas prorrusos que operan en el este de Ucrania prometieron que brindarán paso seguro a los equipos internacionales de rescate y a investigadores que se dirijan al sitio en el que se
precipitó a tierra el avión de pasajeros de Malaysia Airlines
con 298 personas a bordo.
Así lo informó este jueves la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), que mantiene contacto con los rebeldes.
En negociaciones con los enviados de Ucrania, Rusia y la OSCE, con sede en Viena, grupos separatistas de Donetsk convinieron acordonar el sitio donde se encuentran los restos de la aeronave y permitir a las autoridades trabajar en la recuperación de los cadáveres.
Los insurgentes brindaron garantías de seguridad a los investigadores ucranianos y de otros países y a los observadores de la OSCE, y dijeron que cooperarán con las autoridades ucranianas en "todas las cuestiones prácticas que se presenten en el curso del rescate y la investigación", añadió el organismo europeo.
EE.UU. pide preservar pruebas
Los servicios de inteligencia estadounidenses habrían determinado que el avión Boeing 777 fue alcanzado por un misil antiaéreo. El proyectil sería del tipo Buk, posiblemente un M2 (SA-17 "Grizzly" según la denominación OTAN), de acuerdo a autoridades ucranianas que responsabilizan a los rebeldes del derribo.
No obstante, solo una investigación en terreno podría entregar indicios vitales para aclarar el hecho, según observadores.
Estados Unidos, en tanto, exigió en boca de su Presidente, Barack Obama, una
"investigación rápida y sin trabas" del incidente.
El Mandatario estadounidense fijó condiciones a la investigación para determinar qué ocurrió con la aeronave y advirtió que es necesario evitar que desaparezcan pruebas vitales en el sitio de la tragedia.
Washington también exigió un
cese inmediato del fuego en el conflicto interno en Ucrania para garantizar que no se produzcan nuevos incidentes mientras se lleva a cabo una pesquisa internacional sobre el caso.
