Belén Molina asegura que el asesino de Diego los siguió una semana antes del crimen

SANTIAGO.- Durante su declaración en el juicio, Belén Molina, la polola del fallecido Diego Schmidt-Hebbel, aseguró una semana antes del crimen el presunto sicario José Ruz ya estaba vigilando los movimientos de la pareja.

La joven relató que un día en que caminaba en la calle junto a Diego "un sujeto de 40 años, canoso, de contextura media, se nos acercó mucho en un semáforo y se paró detrás de Diego. Me dio la impresión de como que lo estaba midiendo porque lo miraba hacia arriba y nos corrimos, cruzamos la calle y la persona se quedó allí".

Añadió que después del crimen cuando miraba las fotos de José Ruz "me di cuenta de que era la misma persona que mató a Diego. Ya lo había visto antes".
 
A juicio del Fiscal Carlos Gajardo, el hecho de que los hubiera estado siguiendo da cuenta de la premeditación con que operó Ruz en el asesinato del joven economista.

Su padre le contó que Diego había muerto
 
Belén relató además el dramático momento en que se enteró que su pololo había muerto, luego de ser trasladado hasta un centro asistencial. La joven recibió la triste noticia mientras se encontraba junto a su padre prestando declaración por lo ocurrido.
 
"Sentí una sensación de frío y llamé a mis primos, pero nadie me contestó. En eso veo que a mi papá le sonó el celular. Miró a varios lados y cortó, lo miré y le digo 'Papá, Diego se murió', pero él me tranquilizó y le pedí que me dijera la verdad. Se le llenaron los ojos de lágrimas y me dijo que se había muerto, que Juan José le avisó", recordó, emocionada, la joven, mientras José Ruz evitaba mirarla.
 
La odontóloga indicó además que cuando los policías le preguntaron si su familia o la de Diego tenían enemigos, ella pensó de inmediato en su tía María del Pilar Pérez y les entregó su nombre.
 
"Pensé en Pilar por todas las historias familiares. Porque nos trataba de hacer la vida imposible, por lo que pasó con su nuera y por lo que pasó con Carlos Felipe, que lo mandó a matar, y también por la sospecha de que ella tenía algo que ver con la muerte de Francisco Zamorano", explicó.
 
Señaló que horas después de la muerte de su pololo, ella y su padre reconocieron al sospechoso en una rueda de presos. "Reconocí al asesino de Diego. Lo vi y casi me desmayo (...) Lo reconocí a pesar de que estaba rapado. Mi papá también lo reconoció, era infaliblemente él", aseveró.
 
A petición del fiscal Carlos Gajardo, Belén también reconoció a José Ruz durante la audiencia. En ese momento, el sujeto miró a la joven por unos pocos segundos y luego desvió la mirada. El persecutor también le pidió que reconociera a su tía, María del Pilar Pérez. Entonces la imputada miró a su sobrina y esbozó una sonrisa.
 
Tras entregar su testimonio, la joven fue interrogada por los abogados defensores, Mario Palma y Boris Hrzic.