SANTIAGO.- La ministra secretaria general de la Presidencia, Paulina Veloso, informó hoy que el Gobierno decidió conferir suma urgencia al proyecto de ley presentado por el senador Alejandro Navarro para que los condenados por delitos terroristas, en los casos de reivindicaciones indígenas, obtengan la libertad vigilada con el compromiso de no reincidir en acciones violentas.
Dicha medida obliga a que la iniciativa se tramite en cada Cámara en un plazo no superior a los diez días.
Esto luego que los tres mapuches y la activista pro indígena condenados por incendio terrorista depusieran en la tarde de ayer una huelga de hambre que se prolongó por 63 días, con la condición de que el Ejecutivo tomara la decisión anunciada este lunes.
Minutos más tarde, el ministro de Justicia Isidro Solís, confirmó la información entregada por Veloso.
Ante la consulta de si el Gobierno cedió finalmente a las presiones de los huelguistas, Solís aseguró que "las decisiones se van a tomar en el Congreso y lo que nosotros hemos hecho en estos momentos es cumplir con la obligación desde el punto de vista carcelario.
En tanto, el ministro del Interior, Andrés Zaldívar señaló que la decisión del Gobierno se fundamentó en razones humanitarias y judiciales, "ya que efectivamente hay contradicción entre los fallos que se han dictado", respecto a este tipo de reos.
El término del ayuno fue producto de la crucial intervención del obispo de Temuco, Manuel Camilo Vial, y la presencia en la cárcel de los senadores Jaime Naranjo y Navarro (PS), además del vocero de los ayunantes, José Cariqueo.
Vial actuó como garante de un documento de ocho puntos suscrito entre los parlamentarios y los ayunantes, que apunta a lograr la libertad vigilada de los cuatro huelguistas.
De esta manera, y luego de una flexibilización de sus exigencias originales, Patricia Troncoso Robles ("La Chepa"), Juan Carlos Huenulao Lielmil y los hermanos Jaime Florencio y Juan Patricio Marileo Saravia, condenados a 10 años de cárcel por incendio terrorista del fundo Poluco-Pidenco, de Forestal Mininco, terminaron la huelga de hambre líquida iniciada el 23 de marzo, en la cárcel de Angol.
Los ayunantes pusieron un plazo de 30 días para que se apruebe la ley, ya que en caso contrario reiniciarán la huelga.
