Ella, siempre rubia y delgada, de aspecto algo inocentón, era una actriz debutante de apenas 19 años cuando conoció, en el set de filmación de la película '”Firstborn”, a un tal Robert Downey Jr.

Él, en ese entonces, guapo y joven promesa del cine, tenía todo para seducirla y así el flechazo fue fulminante.

Estuvieron siete años juntos, cinco de ellos conviviendo, hasta que finalmente la relación colapsó. ¿La razón? Downey se hizo adicto a todo tipo de drogas protagonizando sendos escándalos y pasando largas temporadas tras las rejas, hundiendo así su prometedora carrera hasta lo más profundo.

Jessica aguantó y aguantó paciente, trató de ayudarlo y sacarlo del vicio pero sus esfuerzos fueron en vano. Por más que él le prometía que iba a cambiar, al cabo de un tiempo su rostro volvía a aparecer en algún reporte de prensa y no precisamente por sus méritos actorales.

Así las cosas y pese al amor que existía entre ellos Parker se dio por vencida en 1991. Él ha señalado que “estaba enamorado de Jessica, pero eso claramente no era suficiente”. Y que  “era muy egoísta. Me gustaba tomar y además tenía problemas con las drogas. Eso no iba con ella… Trató de ayudarme y se ofendió mucho al ver que yo no mejoraba mis actitudes”.

Tras el quiebre, Downey siguió con su desenfrenado estilo de vida, asistiendo en varias ocasiones a rehabilitación para nuevamente recaer. Recién ahora se habría recuperado al volver en gloria y majestad a la pantalla grande con “Iron man”.

Entre medio, se casó, se divorció y tuvo un hijo llamado Indio y actualmente está ligado a la productora Susan Levin, a quien ha señalado como un fuerte pilar para rehabilitarse definitivamente.

Jessica, por su parte, tuvo algunos romances pasajeros, como con el mismísimo John Kennedy Jr., Nicolás Cage y el cantante Joshua Kadison, que hasta le dedicó su canción “Jessie”, para luego involucrarse y