Adolescente de profesión
Brooke Christa Shields nació en Nueva York el 31 de marzo de 1965. Tanta era su hermosura que su madre, Teri, supo siempre que tenía un tremendo potencial entre sus manos y no sólo una hija preciosa.
Ya a los 11 meses, la pequeña hizo su primera aparición en los medios de comunicación masiva en una publicidad de jabón para bebés. Después, vinieron champúes, colonias y cientos de fotos distintas, incluso eróticas.
Brooke Shields se coló en la pequeña y en la gran pantalla gracias a esa belleza turbadora a la que sucumbieron grandes directores. Ya a los 12 años, apenas una preadolescente, se convirtió en un fenómeno con la polémica “Pretty Baby”, donde interpretaba a una prostituta, a las órdenes del director Louis Malle.
Luego le llegaría el turno a Randal Kleiser con la "Laguna azul", película obligada de los adolescentes de la época y que la convirtió en uno de los íconos que las niñas querían seguir. Finalmente, fue el turno del afamado cineasta Franco Zeffirelli, quien la dirigió en "Amor sin fin".
Pero el inexorable paso del tiempo la transformó en mujer y, contrario a cualquier pronóstico, su sensualidad se desarrolló en forma inversamente proporcional a sus años: más que un símbolo sexual, el futuro la encontró hecha una muñeca insípida, incapaz de moverle un pelo a nadie… que no fuera el gran tenista Andre Agassi.
El 19 de abril de 1997, se casaron tras cuatro años de noviazgo. Los problemas empezaron luego; ya cuando Brooke y su madre solicitaron a Agassi la firma de un acuerdo prenupcial y el tenista lo rechazó, lo que apareció en los titulares fue un indicio de lo que vendría después. En febrero siguiente, demandaron al "National Enquirer" por publicar rumores de una supuesta infidelidad de la actriz.El romance entre el rebelde tenista y la bella actriz se acabó al poco tiempo de casados, cuando Agassi pidió el divorcio, que le fue concedido el 9 de abril de 1999.
En su profesión las cosas tampoco fueron mejores; tras sus prometedores comienzos, Brooke Shields sufrió el encasillamiento en papeles que sólo pueden llevarse a cabo cuando todavía no se han cumplido los 20. Se vio confinada a películas de segunda categoría y a telefilmes de escasa repercusión; la última de ellas "The bachelor", que sólo se destacó por su excelente música y la presentación de promisorios actores.