Vittoria
Colonna
Nació en 1492. Hija de Fabrizio Colonna,
señor de Paliano, príncipe de Tagliacozzo, y de
Inés de Montefeltro, hija de Federico, príncipe
de Urbino.
A los 17 años se casó con el marqués
de Pescara, Ferrante Francesco de Avalos, a quien amaba sin
ser correspondida. Aunque sufrió las infidelidades de
su marido quien la engañaba hasta en su propia casa,
su muerte (1525) no la consoló.
Al enviudar se refugió en la religión
y en la poesía. Se trasladó a un claustro en Roma
y después en Nápoles.
Era intelectual y se relacionó con los
grandes escritores italianos de la época: Sadolet, Bembó,
Castiglione, Ariosto PAblo Jove, Bernardo Tasso, Lodovico Dolce.
Después de 1530 sus sonetos se difunfieron
por italia alcanzando una fama insual para una mujer en ese
tiempo.
En 1534 la religión la absrovió
completamente. Una de sus preocupaciones en este sentido era
el espíritu de la reforma católica. Fue amiga
de Pietro Carnesecchi, de Giberti y de Reginaldo Pole. También
Renata de Ferrara y Margarita de Navarra.
Hacia 1535 conoció a Miguel Ángel
con quien tuvo una gran amistad. Ella vivía en Roma,
en el claustro de San Silvestro in Capite y se reunían
los domingo en la iglesia de San Silvestro en el Monte Cavallo,
donde vivía el artista. Juntos discutían los capítulos
de San Pablo o de arte, en ocasiones, como la veces que Francisco
de Holanda se les unió.
Cuando comenzó la contrarreforma la duda se apoderó
de su pensamiento. Se sometía a ayunos y a cilicios que
la tenían en los huesos.
Su amigo Riginard Pole la ayudó y la
obligó a someterse a su dirección. Pero ella renegó
de sus antiguas amistades, como de Ochino, cuyos escritos envió
a la Inquisición.
Murió
el 25 de febrero de 1547, causando una gran pena a Miguel Ángel.
Fuente:
Rolland, Roman. Miguel Ángel. |