Todos los métodos de planificación tienen contraindicaciones específicas, exceptuando los naturales y de barrera como el condón, cuyo problema es que no son recomendables para la mujer que ‘no quiere’ embarazarse por ningún motivo. El condón cuando es usado correcta y persistentemente ofrece una protección adicional al disminuir en forma importante el riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual.
El parche podría excepcionalmente producir irritación en el sitio de colocación. Los DIU, en tanto, no son ideales en las mujeres que nunca se han embarazado o han tenido embarazos tubarios en su último embarazo, o tienen sangrados no aclarados o algún cáncer ginecológico.
Cabe señalar que no hay evidencia científica actual que asegure que algún método anticonceptivo conocido sea abortivo, según asegura el médico Horacio Croxatto. En el caso de las T de cobre o de hormonas, éstas podrían serlo sólo si se implantan en el útero 5 días después de la relación sexual, porque ello provocaría la inflamación del endometrio en momentos en que puede estar dándose la anidación. La función de la T de cobre es impedir la sobrevivencia de los espermios en ese ambiente inflamatorio, por lo que no puede darse la fecundación.