De todos modos, a partir de 2001 la cantante emprendió dos giras de alcance mundial, el Tour Anfibio y el Tour de la Mangosta, y apareció en la tapa de la revista Rolling Stone como la representante latina del pop al lado de Britney Spears y Mary J. Blige. "Mucha gente se equivocó pensando que yo era una Britney Spears más o una Jennifer Lopez más. Como también en alguna oportunidad me quisieron poner en la casilla de Alanis Morissette, hasta que entendieron que tenía una propuesta musical propia", dijo en 2003, días antes del concierto que dio el 8 de marzo de ese año, ante una multitud de cincuenta mil personas en el Estadio Nacional.
La diva global
Shakira dejó pasar cuatro años sin noticias frescas, pero sólo para contraatacar con una ofensiva aún mayor. La colombiana siempre se las arregla para estrenar una mochila más monumental en cada incursión. Su reciente estrategia, de hecho, le demandó dos años para desenvolver el plan completo: si Laundry service / Servicio de lavandería había sido un disco bilingüe; el nuevo proyecto consiste en dos discos casi paralelos, uno en inglés y otro en español.
Son Fijación oral vol. 1 (2005) y Oral fixation vol. 2 (2006). El doble de trabajo y el doble de éxito: funciona. Cada volumen cuenta con un impacto de carácter mundial, el primero con el reggaetón "La tortura" a dúo con el cantante español Alejandro Sanz, y el segundo con el hip-hop sabrosón "Hips don't lie" (o sea, "Las caderas no mienten"), a dúo con el rapero estadounidense Wyclef Jean, conocido tras su paso por el grupo The Fugees. Ambos discos tienen además en común el dueto con el rockero argentino Gustavo Cerati, que en uno se llama "Día especial" y en el otro "The day and the time". Luego de eso, Shakira ya ha salido a cobrar: su actual gira se llama "Fijación oral" y es la que la trae de vuelta a Chile.
"Yo me siento más cerca que nunca de mi latinidad, y este álbum me da la confirmación de lo cerca que estoy de mi público hispano y de lo mucho que ellos me han acompañado", ha dicho acerca de su regreso. Aunque el que último ha abierto la boca es el aludido Fernando de la Rúa, su suegro, para hablar de la familia: en República Dominicana dijo que, después de cinco años de noviazgo, Shakira y Antonio de la Rúa planean casarse y tener hijos, pero no por ahora. "Ellos prefieren esperar... es que a los chicos de ahora nadie los entiende. Los chicos de hoy prefieren vivir como pareja, ellos no creen que el matrimonio sea necesario para ser felices".