Los últimos meses no han sido muy tranquilos para Tesla en el mercado chino. El fabricante estadounidense ha debido enfrentar un aumento en la fiscalización de los entes reguladores estatales luego que sus vehículos fueran cuestionados por la seguridad que ofrecen y se denunciara un mal servicio a los clientes.
Dada la importancia de la plaza, la más grande para el fabricante luego del mercado estadounidense, Tesla decidió redoblar su interacción con los organismos reguladores y fortalecer a su equipo encargado de mantener buenas relaciones con el gobierno local.
El cambio de estrategia de Tesla, que ha llevado a más interacciones tras bastidores con autoridades en Pekín, muestra la seriedad con la que la automotriz estadounidense considera los reveses en su segundo mayor mercado.
También ocurre en momentos en que China intenta regular a las compañías privadas grandes y poderosas, especialmente en el sector tecnológico, por preocupaciones sobre su dominio de mercado.
Por el momento Tesla no se ha pronunciado ante una solicitud de comentarios sobre este punto.
Al igual que en otros sectores, los reguladores de China, el mayor mercado automotor del mundo, discuten políticas de la industria y criterios con compañías globales y locales, asociaciones de la industria y grupos de expertos.
Los productores suelen sumarse a esas reuniones en China, pero a diferencia de rivales como Toyota Motor y General Motors Co, los ejecutivos de Tesla se mantenían ausentes de las reuniones a puertas cerradas, según cuatro personas con conocimiento del tema.
En su lugar, los ejecutivos de Tesla hablan regularmente en conferencias de alto perfil de la industria. Fuera de China, el presidente ejecutivo de Tesla, Elon Musk, suele utilizar Twitter para comentar sobre decisiones o criticar a reguladores o normas.
En las últimas semanas, ejecutivos de Tesla asistieron al menos a cuatro discusiones de política, sobre temas que incluyen el almacenamiento de vehículos, tecnologías de comunicación entre vehículos e infraestructura, reciclaje de automóviles y emisiones de carbono, dijeron las fuentes.
Tesla, con sede en California y que fabrica los sedanes Model 3 y los utilitarios deportivos Model Y en su propia planta en Shanghái, no realizó grandes compromisos en las reuniones, pero participó en algunas discusiones, afirmaron.
Tesla también está ampliando su equipo de relaciones gubernamentales en China, dijo una de las fuentes.
Según dos anuncios de reclutamiento publicados en abril en su cuenta de WeChat, Tesla está contratando gerentes para actualizar su base de datos de políticas y mantener relaciones con el gobierno y asociaciones de la industria para "construir un ambiente externo armonioso para apoyar el desarrollo del negocio de Tesla en el mercado regional".