El fabricante de vehículos Ford Motor Co. indicó que prevé sufrir un impacto de 1.500 millones de dólares este año en sus ganancias operativas debido a los nuevos aranceles impuestos por la administración de Donald Trump, y retiró su pronóstico financiero inicial para todo el año debido a la incertidumbre creada por la política comercial de Estados Unidos.
Ford indicó que sus ganancias netas disminuyeron en aproximadamente dos tercios en el primer trimestre a 473 millones de dólares, o 12 centavos por acción, comparados con 1.330 millones, o 33 centavos por acción, alcanzados en el mismo trimestre del año anterior.
Los resultados superaron las expectativas de los analistas encuestados por FactSet, quienes pronosticaban que las ganancias por acción para el trimestre se mantuvieron sin variación. Se pronosticaba que los ingresos serían de 38.020 millones de dólares.
La semana pasada, General Motors dijo que se está preparando para un posible impacto de hasta 5.000 millones de dólares en 2025 por los nuevos aranceles y en esa línea se estimó que Ford y Tesla sufrirán un impacto menor que GM y otros fabricantes de automóviles a causa de los aranceles porque ensamblan más de sus autos en Estados Unidos. Aun así, el impacto no será insignificante.
Ford originalmente pronosticó ganancias antes de intereses e impuestos para 2025 en un rango de entre 7.000 y 8.500 millones de dólares, pero ayer lunes la compañía dijo que los riesgos asociados con los aranceles "hacen que actualizar el panorama para todo el año sea un desafío en este momento, dado el rango potencial de resultados".
El CEO de Ford, Jim Farley, ha promocionado la ventaja que la mayor producción nacional le da a su compañía, y lo hizo nuevamente ayer, reconociendo que la sacudida a la industria por los nuevos aranceles aún está en sus primeras etapas.
"Es demasiado pronto para evaluar la dinámica del mercado relacionada, incluidas las posibles interrupciones en la cadena de suministro de toda la industria", manifestó Farley en una llamada con analistas. "Los fabricantes de automóviles con la mayor presencia en Estados Unidos tendrán una gran ventaja, y vaya que eso es válido para Ford. Nos pone en la posición de liderazgo", dijo el ejecutivo.
El presidente estadounidense Donald Trump dijo que uno de los objetivos de su política comercial es trasladar más fabricación de productos a Estados Unidos. La semana pasada, Trump firmó órdenes ejecutivas para relajar algunos de sus aranceles del 25% sobre automóviles y autopartes, lo que, según el presidente, daría a las automotrices más tiempo para hacer la transición de sus operaciones de manufactura.
Los fabricantes de automóviles y los análisis independientes han advertido que los aranceles podrían aumentar los precios, reducir las ventas y hacer que la producción en Estados Unidos sea menos competitiva a nivel mundial.
El impacto potencial de los aranceles dominó la llamada de Ford, y un ejecutivo de la marca advirtió cómo un solo problema con algunas piezas podría tener un efecto mayor en la línea de producción.
"Los materiales de tierras raras de China, por ejemplo, cómo se importan, no sólo para nosotros, sino para toda la industria, se ha vuelto bastante complicado en las últimas semanas", dijo el director de operaciones Kumar Galhotra. "Sólo se necesitan unas pocas piezas para potencialmente causar alguna interrupción en nuestra producción", añadió el ejecutivo.