Fue una fecha inédita para el fútbol chileno. El VAR, el sistema de ayuda tecnológica, estuvo presente por primera vez en un duelo jugado en tierra criolla. Los encargados de esto fueron Julio Bascuñán y Héctor Jona con Raúl Orellana como asistentes 1 y 2 respectivamente.
La instancia fue la semifinal entre la
Universidad Católica y Colo Colo por la Copa Chile en el Germán Becker de Temuco.
Y el desempeño del juez Roberto Tobar con el VAR fue correcto. Atinado.
En el primer tiempo, el partido no entregó la oportunidad de que la tecnología apareciera. No se necesitó. Pero en la segunda etapa apareció y fue clave.
A los 66', el delantero cruzado Fernando Zampedri ensayó una chilena que dio en la mano del zaguero Juan Manuel Insaurralde. La jugada siguió y el balón salió del campo, pero Tobar detuvo todo. Por segundos escuchó por su intercomunicador y en dos minutos decretó el penal después de chequear la jugada en el monitor.
Mismo protocolo fue en el minuto 90+1'. Juan Cornejo paró un balón con su brazo en el área y después de que la jugada continuara, Tobar con el VAR cobró pena máxima nuevamente.
Además, en más de una ocasión, el réferi detuvo el partido por apenas segundos, desestimando posibles faltas o penales y dejando seguir el juego, en una buena labor por parte del colegiado.
