Quieres ver tu clima local?
Mostrar
Santiago: Viernes 26 de julio del 2024 | Actualizado 21:26
LA PAZ.- La mayor empresa textil estatal de Bolivia, Enatex, cerró sus operaciones con el despido de 800 empleados, que este lunes protestaron para exigir al Gobierno de Evo Morales mantener los puestos de trabajo.
Los trabajadores se manifestaron en La Paz al no haber podido ingresar a la fábrica, luego de una semana de suspensión de actividades con el argumento de que se iba a fumigar la planta.
Según afirmó el secretario general del sindicato de Enatex, Johnny Huancal, la ministra de Desarrollo Productivo, Verónica Ramos, informó el domingo de forma sorpresiva la decisión de cerrar la fábrica.
"Nos ha dicho que la empresa no va más. Estamos en el cierre porque la empresa va a cambiar de rubro, estamos molestos (...) El Gobierno critica a los gobiernos neoliberales y ahora está actuando de esa forma cuando está despidiendo a 800 trabajadores", agregó.
El dirigente sostuvo que la empresa comunicó la semana pasada a los trabajadores que, tras la fumigación, hoy iban a retornar a sus puestos de trabajo, pero fue "una sorpresa" que la ministra les avise el domingo que la textilera paralizará sus actividades.
"No vamos a permitir que nos boten a más de 800 trabajadores y ahora vamos a pedir la reapertura de nuestros trabajos", subrayó y anunció nuevas movilizaciones en La Paz contra el Gobierno.
Según un comunicado del Ministerio Desarrollo Productivo, Ramos explicó que la empresa modificará su naturaleza y dejará de ser Enatex para convertirse en el Servicio Nacional Textil.
La ministra agregó que la nueva entidad estatal pondrá al servicio de los productores de manufacturas textiles "la tecnología y la experiencia" que desarrollaron en el proceso productivo.
Asimismo, dijo que habrá adecuación en el marco de las acciones operativas y administrativas, pero que se garantiza que todos los trabajadores recibirán el pago de sus indemnizaciones.
La fábrica comenzó a tener problemas en el último tiempo con el pago de salarios, aguinaldos y con el cierre de sus tiendas, pese al esfuerzo del Gobierno para relanzar las productos a precios bajos.
El Gobierno creó Enatex en 2012 sobre la base de Ametex, del empresario Marcos Iberkleid, que antes dirigía una factoría con casi 4.000 empleados que afrontó una grave crisis desde que en 2008 Bolivia perdió las preferencias arancelarias que le concedía EE.UU.
El Gobierno de Morales intentó consolidar nuevos mercados para los textiles bolivianos en Brasil, Cuba, Venezuela y Argentina, pero las ventas a esos países no fueron las esperadas.
