La comisión de Hacienda del Senado despachó a Sala este martes el proyecto denominado como Fogape Reactiva o Fogape 2.0.
La instancia aprobó en particular la iniciativa que apunta a crear una nueva línea de créditos con garantía estatal para que las pymes puedan enfrentar la crisis producto de la pandemia, acogiendo la indicación de Hacienda para subir la tasa de interés máxima que podrán cobrar los bancos.
La propuesta original del Gobierno era no fijar una tasa y así establecer una mayor "flexibilidad" para que acotar el número de pymes que queden excluidas de estos préstamos dado su nivel de riesgo, a diferencia de lo que fue la primera línea Fogape, que establecía que la tasa no podía ser mayor a la Tasa de Política Monetaria (TPM) más 3%. Sin embargo, la Cámara de Diputados decidió fijar como tasa máxima la TPM más 4%, lo que fue rechazado desde el Ejecutivo.
Así, para modificar aquello, el Ministerio de Hacienda presentó hoy una indicación que señalaba que la tasa anual a cobrar por la banca no podrá ser mayor a TPM más un 0,6% mensual, lo que se traduce en un máximo de TPM más 7,2% anual.
"Con esto se busca tener un adecuado equilibrio entre tener un poquito más de holgura que nos permita llegar a industrias o sectores económicos que tienen mayor riesgo, por lo tanto, se ven más dificultados de acceder al crédito necesario en esta etapa, y particularmente al refinanciamiento, pero al mismo tiempo cautelando que tengamos una tasa con todo atractiva", explicó Briones.
Una segunda indicación presentada por Hacienda, añadió, -y la cual fue solicitada ayer por lo senadores- dice relación con que las pymes no tengan que pagar el impuesto de timbres y estampillas tanto para quienes contraten nuevos créditos Fogape, como quienes opten por un refinanciamiento.
Ahora la propuesta pasará a ser discutida en la Sala del Senado, debate que podría iniciar esta tarde.
