Los amplios aranceles del presidente Donald Trump entrarán en vigor inmediatamente después de que se anuncien el miércoles, dijo su principal portavoz.
"Tengo entendido que el anuncio de los aranceles se producirá mañana. Serán efectivos inmediatamente, y el presidente ha estado insinuándolo durante bastante tiempo", dijo el martes a los periodistas la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt.
Trump planea imponer aranceles a sus socios comerciales globales el 2 de abril
durante un acto previsto para las 16:00 horas (15:00 horas en Chile) en la rosaleda de la Casa Blanca, la pieza central de su esfuerzo por traer de vuelta la fabricación a EE.UU. y reestructurar un sistema de comercio mundial que lleva tiempo tachando de injusto.
Leavitt dio pocas pistas sobre el tamaño y el alcance de los gravámenes, pero dijo que Trump estaría dispuesto a escuchar a los gobiernos extranjeros y a los líderes corporativos que pidan aranceles más bajos. Señaló que muchas naciones ya se habían puesto en contacto con la administración sobre los planes del presidente.
"Ciertamente, el Presidente siempre está dispuesto a tomar una llamada telefónica, siempre está dispuesto a una buena negociación, pero está muy centrado en arreglar los errores del pasado y demostrar que los trabajadores estadounidenses tienen un trato justo", dijo.
La portavoz también restó importancia a la volatilidad de los mercados antes del anuncio. El temor de los inversores a que los aranceles disparen los precios al consumidor ha provocado una caída de las bolsas estadounidenses durante semanas.
"Como en su primer mandato, Wall Street estará bien", afirmó Leavitt.
A ser consultada sobre la idea de que los asesores de la Casa Blanca pudieran juzgar mal el efecto de los aranceles y perjudicar en última instancia a la economía estadounidense, Leavitt descartó esa posibilidad.
"No se van a equivocar", dijo. "Va a funcionar, y el presidente cuenta con un brillante equipo de asesores que llevan décadas estudiando estos temas, y estamos centrados en restaurar la edad de oro de EE.UU. y convertir a EE.UU. en una superpotencia manufacturera".
