Un informe sobre la inflación estadounidense en gran medida benigno está reforzando los argumentos de los operadores que apuestan a que la Reserva Federal (Fed) pronto recortará las tasas de interés, y algunos ven una mayor posibilidad de una reducción "descomunal".
Durante semanas, los inversionistas han acumulado swaps, opciones y posiciones largas en bonos del Tesoro para apostar a que una inflación moderada permitirá a la Fed reducir los costos de financiamiento en los próximos meses.
Esta opinión tiene cierta justificación, ya que los rendimientos de los bonos del Tesoro a corto plazo cayeron por segundo día consecutivo este miércoles,
mientras que los operadores de swaps elevaron la probabilidad de un recorte de tasas en septiembre a más del 90%.
Las apuestas a que la Fed reducirá las tasas en más de 25 puntos base en septiembre también cobraron impulso.
En una entrevista, el secretario del Tesoro, Scott Bessent, sugirió que la Fed debería estar abierta a un recorte mayor, de 50 puntos base, el próximo mes.
El informe de inflación "fue un poco más sólido que el de los meses anteriores, pero inferior a lo que muchos temían", declaró Rick Rieder, director de inversiones de renta fija global de BlackRock, en una nota.
"Por consiguiente, esperamos que la Fed comience a recortar los tipos de interés en septiembre, y podría justificarse un recorte de 50 puntos base en el tipo de interés de los fondos comunes", dijo.
Claudia Sahm, economista jefe de New Century Advisors, fue más cauta. "Aún no tenemos los datos que den por hecho esto", dado que todavía falta por conocer otro importante informe de inflación, así como los datos clave de empleo.
