Con una leve alza cerró el dólar en el mercado cambiario local en la sesión previo a la decisión de tasa de interés del Banco Central esta tarde, ubicándose en torno a los $915, debido principalmente a una caída en el precio del cobre y una mayor debilidad global de la divisa.
En concreto, el billete verde terminó la jornada con un avance de $1,6 y concluyó sus operaciones más líquidas en $915,20 vendedor.
Felipe Sepúlveda, analista jefe de Admirals Latinoamérica, señaló que "el movimiento acotado se dio tras una jornada en la que el mercado internalizó un posible recorte de 25 puntos base por parte del Banco Central de Chile durante la tarde, lo que limitó reacciones más amplias en el tipo de cambio".
El analista agregó que "en el mercado de materias primas, el cobre profundizó sus pérdidas y cayó 1,03%, hasta US$5,35 por libra, tras la apertura de Wall Street, extendiendo la corrección desde máximos de cuatro meses. Este retroceso se produjo en un entorno de mayor aversión al riesgo, con presión vendedora sobre commodities y activos de riesgo, en medio de señales persistentes de desaceleración en China".
"En este escenario, el cierre prácticamente plano del dólar en Chile refleja un equilibrio entre la caída del cobre -que presionó al alza el tipo de cambio- y una mayor debilidad global del dólar, que actuó como contrapeso. El resultado fue una jornada de escasa direccionalidad, con el mercado a la espera de nuevos catalizadores externos y de señales adicionales desde la política monetaria global", concluyó.
Por su parte, Diego Montalbetti, analista de mercados de Capitaria, explicó que el mercado vivió "una sesión mixta, marcada por correcciones en los mercados, la publicación de datos económicos en Estados Unidos y la cautela asociada a los avances en las negociaciones de paz entre Rusia y Ucrania".
"Las cifras estadounidenses entregan una señal clara de desaceleración gradual. El consumo muestra menor impulso, con ventas minoristas planas; el mercado laboral pierde dinamismo, reflejado en un aumento de la tasa de desempleo; y los ingresos por hora crecen por debajo de lo esperado, reduciendo las presiones inflacionarias. Este conjunto de datos refuerza las expectativas de una Fed más flexible, presionando al dólar global a la baja", agregó.
"Este escenario favorece a las monedas emergentes, incluido el peso chileno, manteniendo un sesgo bajista estructural para el USD/CLP, aunque con episodios de volatilidad intradía y rebotes técnicos de corto plazo".
Asimismo, Montalbetti indicó que "los datos no apuntan a una recesión inmediata en Estados Unidos, pero sí confirman una desaceleración ordenada, un entorno que históricamente resulta negativo para el dólar y favorable para activos y monedas fuera de ese país".
"De cara a mañana, el mercado estará atento a nuevos avances en un eventual acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania, a la publicación de los inventarios de petróleo crudo en Estados Unidos y, en el plano local, a las primeras reuniones y declaraciones del presidente electo José Antonio Kast, que podrían seguir influyendo en las expectativas del mercado chileno", proyectó.
