Pese a que el ex luchador tuvo una infancia y adolescencia problemática, uno de sus primeros problemas que salieron a la luz pública fue en 1989, cuando su ex esposa -la actriz Robin Givens- lo acusó de abuso conyugal y violencia doméstica. Sumado a esto, la mujer aseguró que Tyson tenía inestabilidad mental.
Quizá uno de los momentos más complicados de su vida y carrera. Mike Tyson fue detenido luego de que una joven de 18 años lo acusara de violación. El ex deportista fue encontrado culpable y sentenciado a seis años de cárcel. Sin embargo, tras mostrar signos de buena conducta, fue liberado a los tres años y ocho meses.
Una de sus polémicas llegó al ring. En 1997, durante una pelea contra el estadounidense Evander Holyfield, Tyson protagonizó uno de sus momentos más icónicos: le mordió ambas orejas luego de que su contrincante lo golpeara constantemente en el abdomen. Producto de esto fue descalificado en el tercer round.
Dentro de sus más de 30 detenciones, en 2003 la figura mediática fue encarcelado nuevamente luego de que fuera culpado por asalto, desmanes y acoso en un hotel de Nueva York, acompañado de otros dos hombres. Ese mismo año, Tyson confirmó que había gastado toda su fortuna -cerca de US$ 300 millones- y que se encontraba en bancarrota.
Aunque no cuenta como una de sus polémicas, en mayo de 2009 Mike Tyson vivió un duro momento luego de que su hija menor, Exodus, muriera a los cuatro años de edad producto de un accidente doméstico.