Fuertes acusaciones de monopolio y de corrupción tienen envuelto al Festival de la Canción de Viña del Mar, el certamen más importante de Chile y Latinoamérica. Y es que el evento que millones de personas ven para disfrutar de buena música, tendría por detrás malas prácticas.
Así lo reveló un reportaje realizado por un medio de comunicación: Uno de los vicios que tendría el festival habría comenzado en 2018 cuando Chilevisión decidió entregar toda la producción del evento a Bizarro con el fin de no tener que negociar uno a uno con las empresas involucradas en el espectáculo, y, además, para abaratar costos, ya que la productora les habría cobrado tres millones de pesos menos.
Luego, Canal 13 y TVN, dueños de la concesión del Festival de Viña hasta 2024, hicieron lo mismo, por lo que actualmente Bizarro es la empresa que produce por completo el evento.
La productora -que pertenece a Peter Hiller, dueño de una de las más grandes ticketeras del país, y al músico de la disuelta banda Aleste, Alfredo Alonso- tiene además la concesión del Movistar Arena, el único recinto con capacidad para realizar eventos en invierno.
Estos dos factores habrían ayudado a que se produzca un ambiente de "matonaje" por parte de Bizarro, según revelaron fuentes. Tanto así, que una cláusula del Festival este 2023 estipularía que cada artista que se presentara en la Quinta Vergara, quedaba representado por Bizarro todo el año.
Según más fuentes, Bizarro habría construido un monopolio que dañaría al gremio ya que, si las otras productoras no entregan sus artistas al evento, para el resto del año tampoco tendrían fechas debido a que no podrían utilizar el Movistar Arena en invierno.
Por otra parte, hubo quienes revelaron supuestos vicios de corrupción debido a sobreprecios por artistas o negociaciones para ganar un cupo en la competencia.
Respuesta de Bizarro
Por su parte, el dueño de la productora, Alfredo Alonso, respondió a las acusaciones hechas a través del reportaje. "Tal publicación carece de información fidedigna y afirma hechos que no son verdaderos", comenzó diciendo.
Luego, agregó que "llama la atención que un medio de comunicación periodístico dedique su quehacer a publicar hechos falsos, no chequeados y altamente subjetivos. Por ejemplo, se señala que ´el artista que se presenta en Viña queda representado por ellos (Bizarro) durante todo el año´, en circunstancias que le consta al mercado que ello no es así y es además de fácil comprobación".
Asimismo, comentó que "durante la preparación de la supuesta investigación, Bizarro invitó a la autora del texto a visitar nuestras dependencias, para reunirnos y compartirle documentos verdaderos, negándose ella por falta de tiempo, lo que es inexplicable".
Oficios de Andrés Celis
Debido a las acusaciones, el diputado por el distrito 7 –el cual incluye a Viña del Mar-, Andrés Celis (RN), decidió oficiar a múltiples organismos del Estado para que se revisen los distintos contratos y se corrijan de cara a la próxima licitación que debería quedar zanjada en marzo de 2024, para lo cual hasta el momento hay dos postulantes: Mega y Bizarro por sí solo.
Un oficio será a la Fiscalía Nacional Económica: "Este se trataría por el tema del eventual monopolio que existiría en el tema del Festival de la Canción de Viña del Mar, porque en definitiva le estamos hablando de un contrato de concesión que se celebra entre el Municipio de Viña del Mar y la unión temporal de dos proveedores, que en este caso es TVN y Canal 13, pero nos enteramos que aparece una tercera parte o un subcontratista que se llama Bizarro que es una empresa productora, y quiero conocer cuál es el rol que ellos juegan, no sé si existe algún contrato entre esta unión temporal de proveedores, si existe un contrato de exclusividad, etcétera", dijo el parlamentario a El Mercurio de Valparaíso.
Por otra parte, enviará uno a la
Contraloría, antes que al Ministerio Público. La idea es que el ente fiscalizador "revise bien el contrato de concesión, si se ha cumplido con una de las obligaciones que tiene el municipio en relación la producción, realización, transmisión y una serie de exigencias que van relacionadas con lo que hoy día estaría desarrollando Bizarro".
Un tercer oficio será enviado al Consejo para la Transparencia "para solicitarle una serie de antecedentes, por ejemplo, si se ha cumplido con los montos relacionados con la producción, organización y que me envíen todos los documentos que acrediten que se ha cumplido con aquellos montos".
Ente esto, el presidente de aquel organismo, Francisco Leturia, comentó que "el Festival de Viña es uno de los eventos, quizás, más reconocidos y queridos por buena parte de los chilenos. Aquí hay platas públicas involucradas. Por lo que si surgen dudas acerca de cómo se ha organizado, vamos a colaborar por cierto para que todo se aclare y la ciudadanía pueda conocer todos, pero todos los antecedentes de este caso, para que así se disipen las dudas o se corrijan las irregularidades, en el caso que existan. Vamos a estar especialmente atentos para que toda la información esté a la mano y sea puesta sobre la mesa de forma transparente".
Finalmente, Celis mandará uno al Servicio de Impuestos Internos (SII), con el objetivo de que el organismo le explique "cómo opera el contrato de concesión en relación con Bizarro y con los canales de televisión".
El diputado planteó una solución para no seguir cayendo en este tipo de vicios, que sería "hacer dos licitaciones, una pensando en la Quinta Vergara y otra en el tema de televisarlo junto con las redes sociales". También hizo un llamado a la Municipalidad de Viña del Mar a involucrarse en el tema ya que, de no ser así, esto puede traer consigo un daño patrimonial al festival.