El
cine y el
amor han ido de la mano desde el comienzo de este arte. La gran mayoría de las historias que se cuentan en las salas incluyen elementos de romance que permiten a los espectadores emocionarse y empatizar con los protagonistas. Con tantos relatos, es
difícil encontrar algo nuevo que decir sobre el amor en una película, aunque a veces
surgen excepciones que merecen atención, como el nuevo estreno en cartelera: "Amores Materialistas".
La cinta sigue a
Lucy (Dakota Johnson), una "matchmaker" en Nueva York que se dedica a emparejar a personas de alto perfil. Tras la boda de una de sus clientas, Lucy conoce a
Harry (Pedro Pascal), un hombre apuesto y adinerado que parece prometer el futuro ideal. Sin embargo, en su camino reaparece su exnovio
John (Chris Evans), quien buscará demostrar que en las relaciones existen elementos intangibles que no comprendemos, pero que nos mueven.
"Amores Materialistas" puede sonar, en el papel, como una comedia romántica genérica, pero en su interior se encuentra una
profunda reflexión del amor, el compromiso moderno y aquellas cosas del romance que no podemos describir. Esta es una
película grata, más no perfecta, que
vale la pena revisar y que en esta nota repasamos sus virtudes.
El amor tangible
La directora de esta cinta, Celine Song, ya había demostrado su talento para construir historias románticas con su ópera prima "Vidas Pasadas". En esta segunda entrega, Song apunta a un ángulo más comercial, más tangible del cine romántico, pero aun así encuentra
formas originales de explorar el amor. Esto se retrata particularmente bien en la relación entre Lucy y Harry.
Sin entrar en detalles, la dinámica entre estos dos personajes
destapa muchas de las características del amor moderno: ese que busca compromisos que cumplan expectativas, más que una conexión romántica. Estas son dos personas que en teoría funcionan juntos, pero cuya relación siempre refleja una sensación de que algo está faltando.
Además, son
personajes que se sienten reales. Cada interacción, cada conversación o demostración de afecto simula situaciones que podemos reconocer en nuestras propias vidas. Ese es uno de los grandes méritos de la directora: escribir
personajes interesantes que no están simplemente al servicio de la trama, sino que
tienen profundidad y un contexto más amplio que el que se deja entrever en pantalla.
Chris Evans interpreta a John, el exnovio de Lucy (Dakota Johnson). Crédito: Killer Films.El amor intangible
El amor siempre tendrá un componente subjetivo, aquello que no puede describirse con claridad porque depende de la interpretación personal, y que por lo mismo
adopta diferentes formas en el cine. En el caso de "Amores Materialistas", este aspecto se representa a través de la relación entre Lucy y John.
Esta es un contraste total frente a la relación ya mencionada con Harry: es compleja, financieramente irresponsable, conflictiva, pero, de algún modo, hace mucho sentido. ¿Por qué? Bueno, lo más probable es que
la película entiende muy bien cómo retratar la química en pantalla de manera implícita, sin explicaciones innecesarias al espectador, sino que dando
claves visuales que alimenten este concepto.
Gran parte del mérito se lo debe llevar
Dakota Johnson, quien otorga una de sus mejores interpretaciones como Lucy, mostrando la firmeza y vulnerabilidad de una mujer que entiende lo complejo que es el amor. Por su lado,
Pedro Pascal, quien encarna a Harry, funciona perfectamente como la personificación de las dudas que la protagonista puede tener. Ambos
son muy complementarios.
Los matices del romance
En un plano más general,
"Amores Materialistas" pinta muy bien el amplio panorama actual del romance. En un contexto de aplicaciones de citas, redes sociales y crisis existenciales, la película navega por diferentes ejemplos de personas que buscan amor, romance, ambos o ninguno de los dos. Esta es una realidad que, si bien se exagera en Nueva York,
toca teclas que reflejan la actualidad en el mundo de las relaciones.
Lo valioso de esta entrega es que ocupa estos diferentes contextos para avanzar la trama y no solo para imitar la realidad. De hecho,
la cinta no tiene miedo de pasar por situaciones difíciles que ocurren hoy en las citas y permitir que estas tengan un impacto en sus personajes y en su trama. Es una forma ligera de tocar el tema, pero relevante al fin y al cabo.
En definitiva, "Amores Materialistas" es una película comandada por una extraordinaria Dakota Johnson, respaldada por un carismático Pedro Pascal y llevada por un sólido guion que, como fórmula, resulta en una
entretenida y profunda historia de amor que vale la pena revisar en las salas de cine. Es una recomendación para todos los amantes del romance, así como para quienes no crean tanto en él.
Nota: 4,0/5,0
"Amores Materialistas" ya está disponible
en cines.
Agustín Pérez Achurra, crítico de cine (
https://www.instagram.com/hobby.space/)
