El presidenciable del PRO Marco Enríquez-Ominami.
El Mercurio / Archivo
Diligencia que busca establecer si el hecho se trató de un enfrentamiento o una ejecución de la DINA.
A través de una declaración pública, ME-O señaló que "hoy es la reconstitución de escena de su asesinato. Miguel Enríquez fue médico, un combatiente y un pensador que ha inspirado a muchos. Entendió que la libertad debía lograrse por distintas vías. Que la resistencia no era una opción, era una necesidad".
En esa línea, destacó que su padre "no solo resistió a la dictadura sino que a la infamia y la calumnia (…) ayer mintieron sobre su figura, su legado y sobre lo ocurrido ese día. Ahora, 42 años después y en democracia, en paz, la justicia hace su trabajo de la mano del acucioso trabajo del ministro Carroza".
"Miguel también fue un hijo, amigo y un padre. Sin saberlo un abuelo que ilumina a sus nietas. No tuve la oportunidad de crecer junto a él, me habría encantado. Hoy pienso en todos los que esperaron este día con tanto anhelo. Pienso en mis abuelos, mis tíos, primos y amigos de Miguel que ya no están", afirmó.
"En calle Santa Fe 725, se da hoy un paso hacia la justicia y un paso hacia la esperanza de que sí se puede (…) Nada es imposible, el único obstáculo en la vida es que el corazón no persevere", precisó.
