Más especialización y habilidades blandas: Las carreras para enfrentar la 4ta revolución industrial

La cuarta revolución industrial ya llegó. Y uno de los principales problemas que hay, tanto en Chile como en el mundo, es que las universidades siguen presentando carreras a cinco, seis años de duración. Sin embargo, hoy en realidad el concepto que predomina es que todo es "líquido": todo va cambiando constantemente.

Creo que la educación superior no se ha adaptado a las "carreras líquidas" donde todos los años se repiense la carrera y que la malla curricular no sea algo estático. En ese sentido, hay que fijarse en carreras que se van adaptando de manera constante a lo que va pasando en el entorno, porque en la revolución industrial lo que vemos es que en seis meses todo puede cambiar.

Un 48% de los trabajos de hoy son susceptibles a ser automatizados, entonces hay que empezar a formar profesionales distintos y en ese caso no alcanza solo con estudiar algo, porque todos los días hay temas nuevos a los que hay que adaptarse.

Con estos cambios, hay que buscar carreras que se alejen de las tareas rutinarias y que agreguen habilidades blandas que sean complementarias a la tecnologías para sacarle el máximo potencial y trabajar en conjunto con la automatización.

Carreras que se enfoquen en los científicos de datos (Data Scientist), en la programación, matemáticas e informáticas, todo lo que esté relacionado a la resolución de análisis complejos.

Por otro lado se necesitan profesiones que enseñen a aplicar algo que las máquinas no podrán hacer: la inteligencia social, emocional, todo lo que es la creatividad sería nuestra nueva interfaz de usuario. Así el hombre va poder seguir aportando en las habilidades más cognitivas, porque alguien que no siga desarrollando las habilidades puede ser reemplazable.

El mercado demanda en estos momentos profesionales que tengan algún grado de especialización. Por ejemplo, ya no se necesitan solo un técnico o un ingeniero, hoy cada vez se buscan más a las personas que tengan certificaciones o diplomados, en especial en áreas de la tecnología.

En este momento creo que las carreras técnicas y de ejecución cada día se están masificando y modificando; ahora en carreras como ingeniería mecánica se necesita saber mucho de computación, ya que estos son los que mueven los sensores de un auto, por ejemplo. Hay varias carreras de índole productivo que se han tenido que ir permeando a las tecnologías nuevas.

Las carreras que marcarán una tendencia son las relacionadas a la robótica y también serán muy importantes las relacionadas a la seguridad de la información, las que manejen grandes volúmenes de datos y todo lo que conlleve la interconectividad de las empresas, porque en lo que se refiere al manejo de datos, todavía una gran brecha entre las industrias.

Ahora no se requiere solamente gente 100% técnicos, se buscan habilidades y destrezas como la creatividad para integrar todas estas tecnologías para buscar soluciones a las problemáticas y darle un mejor uso dentro de las industrias.

Algunas carreras se van a potenciar con estos cambios como son Ingeniería en Matemáticas e Ingeniería en Ciberseguridad. Las carreras que corren peligro de desaparecer son aquellas que demandan una mayor mano de obra.

Esta revolución industrial está pensada para darle mayor capacidad de automatización a las máquinas y ahora son ellas las que comienzan a poseer alta tecnología con un gran torrente de datos, siendo capaces de hacer cosas que el ser humano no podría realizar.

Con esta enorme cantidad información, cada artefacto tendrá la capacidad de procesamiento que hará que puedan tomar sus propias decisiones (el Internet de las Cosas). Por ejemplo, hoy vemos que las cosas conversan con las cosas, como es el caso de la nueva línea 6 del metro, que no tiene conductores.

En ese sentido, se necesitan "científicos de datos", profesionales que sean capaces de controlar el procesamiento de información de las máquinas. Pero formar este tipo de trabajadores es un problema a nivel mundial, porque no se está dando abastado y se está realizando un trabajo muy a presión porque ya nos pilló la máquina.

Aún no tenemos resuelto el problema de la inteligencia artificial, es decir, que la máquina piense como un ser humano, y en mi opinión estamos muy lejos de eso todavía. Por lo tanto, seguirán existiendo trabajos donde la intervención de las persona siga siendo necesaria. Hay que ver es cómo nos hacemos cargo de esta dualidad donde van a haber máquinas con seres humanos. Aquí se requerirá que empiece a nacer una alianza bien potente entre lo que son las ingenierías y la medicina.

Vamos a necesitar gente especializada en el Internet de las Cosas, especialistas en el manejo de datos y también lo que esté relacionado con la ingeniería genética, porque es muy probable que se tengan que hacer ciertos cambios para que la máquina pueda ir emulando lo que hace el ser humano, y el cliente del futuro va a demandar una mayor conectividad y que todos los equipos sean fáciles de interconectar A su vez, el desarrollo de la neurotecnología es un conocimiento que se tiene que ir dando, porque recién estamos trabajando fuertemente con lo relacionado al cerebro.