SANTIAGO.- Como una querella carente de antecedentes sólidos se refirió el
abogado Marcelo Hadwa a la acción que la semana pasada ingresó el
fiscal regional de O'Higgins, Emiliano Arias, en contra de su representado, el
persecutor adjunto Sergio Moya.
Y es que luego de casi nueve meses suspendido, y un fallido intento de remoción, Arias retomó sus funciones en Rancagua asegurando no descartar presentar acciones legales contra el nacional Jorge Abbott, y, en contraparte, querellándose contra Moya y el ex regional de Valparaíso, Pablo Gómez, por los delitos de violación de secretos, tráfico de influencias y obstrucción a la investigación.
"Esto no puede ser borrón y cuenta nueva", dijo categóricamente Arias la semana pasada a Cooperativa.
En la acción, de 15 páginas, el regional acusa a Moya -quien a mediados del año pasado lo denunció por una serie de irregularidades que derivaron en una investigación interna y penal-, de coordinarse con Abbott para sacar la causa contra miembros de la Iglesia Católica de la región, al igual que aquella contra los ahora ex ministros de la Corte de Apelaciones de Rancagua.
Le critica haber entregado a Abbott registros de interceptaciones telefónicas para definir al futuro fiscal regional Sur, siendo él beneficiado con el cargo de persecutor jefe de la fiscalía de Puente Alto, la que depende de la jurisdicción Sur.
Para ello, cita, entre otras cosas, una conversación de Moya con un tercero, a través de un grupo de Whatsapp, en la que este anunciaba el traslado de la causa contra los magistrados de Rancagua.
"'¿Por qué querrían llevarla para Santiago?', a lo que el Fiscal Sergio Moya responde: 'Porque yo lo pedí (…) (v)oy a ser fiscal jefe de puente alto, por qué yo lo pedí, para mí es importante'", fueron los mensajes incluidos en la querella.
La respuesta de la defensa
En conversación con Emol, el abogado y doctor en Derecho Penal, Marcelo Hadwa, explicó que asumió la defensa de Moya el pasado sábado y que aún debe reunirse con este último para estudiar punto por punto la querella.
Pese a ello, y en base a lo analizado a grandes rasgos, señaló que la acción del regional "no se fundamenta en antecedes sólidos. Las imputaciones que se realizan son bastante vagas y no dan cuenta de situaciones de comisión de delitos".
"Estamos absolutamente convencidos de la inocencia de nuestro representado, el señor Moya. Él está muy tranquilo, trabajando, yendo a audiencias", acotó.
En esa línea, el abogado informó que ayer presentó ante el 7° Juzgado de Garantía un recurso de reposición a fin de revertir la admisibilidad de la querella, decretada por dicho tribunal el pasado viernes.
"Refiere a algunos posibles vicios de fondo y forma que podría tener la querella y por la que debería ser declarada inadmisible. También por lo curioso que resulta que un fiscal regional esté a la vez actuando como querellante en una causa (...) El señor Arias no puede asumir dos posiciones en el proceso, de fiscal por un lado y la de querellante por el otra", añadió Hadwa.
"Las imputaciones que se realizan son bastante vagas y no dan cuenta de situaciones de comisión de delitos".
Abogado Marcelo Hadwa.
Sobre esto último explicó que, si bien un fiscal que es objeto de algún delito puede querellarse, en este caso él no figura como víctima directa: "Los fiscales conducen una investigación penal y cada parte tiene su parte asignada y no se pude confundir. Si bien fiscal y querellante pueden perseguir objetivos comunes, el fiscal no es una persona que trabaja a favor del querellante, él se rige por principio de objetividad".
"Se puede generar el absurdo que el fiscal que lleve la causa decida no perseverar y en cambio el fiscal Arias va a concurrir señalando que no, que se debe continuar (...) Y otra situación más compleja es que los hechos que se describen parecieran haber ocurrido en Rancagua. Si el tribunal de Santiago se declara incompetente, la causa se va para allá y él va a ser jefe de zona y querellante", detalló.
Y zanjó: "Él no es legitimario activo para presentar este tipo acciones".
