Desde el FA impulsaron el rechazo a las modificaciones, apuntando a que ellos estiman una rebaja del 50% inmediata.
Aton
Cuatro cambios hechos por el Senado debían aprobar en la Cámara de Diputados para que el proyecto que rebaja la dieta parlamentaria se fuera directo a ley. Sin embargo, y tal como había anticipado algunos sectores de la oposición,
una de esas modificaciones no logró los respaldos necesarios y la iniciativa se irá a comisión mixta.
Se trata de la determinación hecha por la Cámara Alta de que sea el
Consejo de Alta Dirección Pública (ADP) el que decida, en un plazo de 30 días desde despachada la norma, el sueldo que recibirán los congresistas. Ellos lo harían -según establecieron los senadores- mientras que en se crea el organismo definitivo encargado de esta labor.
De esta manera y tras seis años de tramitación, al proyecto impulsado por diputados del Frente Amplio, le falta solo un paso para convertirse en ley.
Justamente los autores de la iniciativa, diputados
Vlado Mirosevic (PL), Gabriel Boric (CS) y Giorgio Jackson, respaldados por sus pares frenteamplistas y el resto de la oposición (a excepción de algunos demócratacristianos), fueron quienes se negaron a esta modificación.
Su argumento se basó en lo aprobado en primera instancia por la Cámara que considera que una vez que sea despachada por el Congreso los parlamentarios rebajen su sueldo inmediatamente en un 50% y luego esto sea ratificado o modificado por el organismo creado para este fin, estipulado en la ley.
Si bien este grupo de diputados y la mayoría de oposición se negaron a todas las enmiendas hechas por los senadores, todos los demás lograron avanzar y fueron aprobadas, sin embargo, este artículo sacó solo 91 votos a favor (59 en contra y una abstención) y por tratarse de una erforma constitucoinal requería de 93 votos de respaldo.
