El ministro de Educación dijo que "es altamente probable" que la fecha del test se defina en el mes de julio.
El Mercurio (Imagen referencial)
SANTIAGO.- Todo apunta a que, por segundo año consecutivo, la prueba para ingresar a las universidades no se aplicará en su fecha habitual. El año pasado el estallido social obligó a postergar la entonces PSU para el mes de enero de 2020, y en esta ocasión la pandemia llevaría nuevamente a retrasar ahora la Prueba de Transición.
Así lo dijo hoy el ministro de Educación, Raúl Figueroa, quien comentó en T13 radio que "se ha estado trabajando con el comité de acceso y lo que falta es definir fundamentalmente la fecha".
La autoridad cree que "es altamente probable" que ésta se defina en el mes de julio, como plantean los rectores. Y aunque aún no se zanja, afirma "está claro que esa prueba se va a hacer lo más tarde posible".
"Yo anticipo desde ya que, obviamente, no va a ser en noviembre, va a ser lo más tarde que se pueda, en la medida en que eso no afecte el proceso de admisión", señaló.
Consultado si era partidario de hacer de todas formas la prueba este año, el ministro afirmó que "sí", y que "hay que hacerla tomando todas las medidas necesarias".
"Creo que es muy importante (realizarla), porque el proceso de acceso a la educación superior es un proceso selectivo en el caso de las universidades, que requiere ciertos instrumentos, y no basta simplemente con los ranking (de notas) o el promedio de enseñanza media, sino que es también importante incorporar otros elementos que permitan predecir de mejor manera el desempeño futuro de los alumnos", sostuvo.
Ya se habían anunciado modificaciones a la Prueba de Transición, a fines de mayo, cuando se ajustaron los contenidos que se considerarán este año, eliminando aquéllos que "no se alcanzarán a cubrir de buena manera" debido a la pandemia.
