Nuevos antecedentes se han conocido a casi dos meses del triple crimen que afectó al fotógrafo Eduardo Cruz-Coke y sus dos hijos de 17 años y por el cual, su cuñado y tío de las víctimas, Jorge Ugalde, está formalizado y en prisión preventiva. Uno de esos nuevos antecedentes apuntan a una segunda arma en la escena del triple crimen -que podrían impulsar nuevas diligencias en la causa- y los próximos resultados del examen psiquiátrico al que se sometió a Ugalde, para determinar su imputabilidad. El Ministerio Público, a través de la unidad de Flagrancia de la Fiscalía Metropolitana Oriente, consiguió que el Servicio Médico Legal concretara ese análisis. Es por ello que Ugalde fue trasladado hace dos semanas hasta un centro especializado para un estudio de sus facultades mentales. La Fiscalía busca asegurar la prueba que decida llevar a un eventual juicio oral y evitar posibles "vicios" que pudieran ser alegados por la defensa. Sobre nuevas formalizaciones, las pesquisas, por ahora, no apuntan a otros posibles involucrados, por lo que no habrían otros acusados, incluyendo a la hermana del fotógrafo y esposa de Ugalde, pese a tener aún calidad de imputada. Sobre el arma, un peritaje del Servicio Médico Legal planta la posibilidad del uso de dos armas en el asesinato de Eduardo Cruz-Coke. Según el informe de la autopsia, que analiza las lesiones en el cuerpo de la víctima, existen algunas que "comparten características morfológicas similares y dos de ellas presentan un extremo romo y otro aguzado, a diferencia del resto que presenta ambos ángulos aguzados".
