Ya han pasado un poco más de tres meses desde que comenzó la pandemia del
coronavirus en China y aunque todavía hay
muchas interrogantes respecto al patógeno, también hay
algunas cosas bastante claras,
como por ejemplo
la forma en que se propaga.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el coronavirus puede propagarse de persona a persona a través de las gotículas procedentes de la nariz o de la boca que salen despedidas cuando alguien infectado tose o exhala. Las gotículas pueden ingresar al organismo de dos maneras: directamente al inhalarlas, o bien cuando quedan adheridas a objetos o superficies que luego otra persona toca, llevándose el patógeno a boca, nariz u ojos cuando se los toca con sus manos.
De acuerdo a un estudio publicado en el New England Journal of Medicine, e
l coronavirus puede vivir por diferentes períodos de tiempo en las distintas superficies. Así, mientras en el cobre vive por solo cuatro horas, en el plástico lo hace por varios días. Por esta razón, resulta importante
tener precaución con los elementos del exterior que se entran al hogar, entre ellos la comida a domicilio.
Consultado por el tema en un webcast de la Academia Australiana de Ciencia, el inmunólogo y Premio Nobel de Medicina 1996, Peter Doherty, sostuvo que aunque a su parecer los envases de delivery no son una fuente grave de infección, se deben "tener en consideración".
"Nos han dicho que (el coronavirus) puede vivir en cartón y papel por hasta 24 horas. No creo que esa sea una gran fuente de infección, pero es algo que se puede tener en cuenta cuando llevas a casa una caja de pizza", sostuvo.
En ese sentido, recomendó abrir la caja de pizza y lavarse las manos antes de sacar la comida de su interior. Posteriormente, desechar la caja y volver a lavarse las manos.
En relación al plástico y al acero, Doherty sostuvo que el patógeno puede vivir al menos tres y hasta nueve días. "Así que si llevas plástico (a tu casa), puedes desinfectarlo con algún spray o simplemente abrir todo, lavarte las manos antes de sacar la comida y quizás traspasarla a otro recipiente antes de meterla al refrigerador”, sugirió.