Zara y Mike Tindall en una fotografía de 2018.
Reuters
Zara Tindall, la nieta mayor de la reina Isabel II,
y su esposo, el ex jugador de rugby
Mike Tindall, fueron padres por tercera vez el domingo,
en un nacimiento algo fuera de lo común para la realeza, ya
que ocurrió en el baño de la casa de la pareja luego de que se quedaran sin tiempo de llegar al hospital.
Lucas Philip Tindall pesó 3,7 kilos, según detalló el miércoles un representante de la pareja. El segundo nombre del pequeño era un homenaje al padre de Mike Tindall y al abuelo de Zara, el príncipe Felipe. Es el 22do en la línea de sucesión al trono, pero no tendrá título de alteza real.
El ex rugbista, de 42 años, reveló que la rapidez del nacimiento los tomó por sorpresa y que había tenido que apurarse para conseguir una colchoneta para su esposa, de 39 años y quien, como su madre, la princesa Ana, tuvo una exitosa carrera como jinete. El niño es el 10mo bisnieto de la reina Isabel y el príncipe Felipe.
"De modo que sí, fue correr al gimnasio, tomar una colchoneta, llegar al baño, poner la colchoneta en el piso, toallas, sostener, sostener, sostener", comentó en el podcast The Good, The Bad & The Rugby.
La última incorporación de la familia Tindall tiene una hermana de 7 años, Mia, y otra de dos, Lena, que no estaban en casa en el momento del parto.
Tindall dijo que una amiga de su esposa, Dolly, que también asistió a los dos nacimientos previos, estuvo presente.
"Estaba allí y se dio cuenta de que no habríamos llegado al hospital a tiempo", dijo Tindall. "Por suerte, la matrona que iba a encontrarse con nosotros en el hospital no estaba tan lejos, de modo que llegó en auto justo cuando habíamos adoptado la posición, y la segunda matrona llegó justo después de la principal", agregó.
El ex jugador bromeó con que esta podría ser una buena ocasión para hacerse una vasectomía.
"Literalmente, fue como 'Sí, a cortar, a cortar'. Tengo un chico, ya está, he terminado", dijo.
