SANTIAGO.- La agencia clasificadora Feller Rate bajó la clasificación de riesgo asignada a las acciones de la semiestatal Zona Franca de Iquique (Zofri), desde "Primera Clase Nivel 3" a "Primera Clase Nivel 4".
El cambio se fundamenta en el incremento de riesgo que la Ley 19.669 (Arica II) representa para el negocio en que se desenvuelve la empresa. Esta amplía el ámbito de acción de los centros de exportación y crea la figura del mandatario.
La clasificación de riesgo considera, asimismo, el alto volumen de operaciones de la empresa, lo que compensa en parte su baja flexibilidad para realizar inversiones. Adicionalmente, refleja la tendencia hacia un ámbito más competitivo y con menores aranceles, escenario que podría afectar la capacidad generadora de negocios de sus franquicias aduaneras y tributarias.
La empresa posee la concesión de la Zona Franca de Iquique hasta el año 2030. Ese contrato le otorga los derechos de administración y explotación a cambio del pago del 15% de sus ingresos al Estado de Chile. Sus principales fuentes de ingresos son el arriendo de terrenos e instalaciones a empresas usuarias industriales y comerciales mayoristas, el arriendo de locales en su centro comercial para ventas al detalle y el servicio de almacenaje.
Aguas Cordillera
Por otro lado, la agencia subió la clasificación de riesgo de las cinco emisiones de bonos vigentes de Aguas Cordillera desde "BBB" a "A+". Las perspectivas, por su parte, pasaron de "En Desarrollo" a "Positivas".
El cambio de clasificación reconoce, principalmente, la nueva estructura de propiedad de Aguas Cordillera, que pasó a ser controlada por la Empresa Metropolitana de Obras Sanitarias (Emos), principal operador sanitario en Chile, clasificado "AA" por Feller Rate.
Su nuevo accionista mayoritario (100% de la propiedad) atiende a más de 1.150.000 clientes en la Región Metropolitana, con coberturas de agua potable y alcantarillado cercanas al 100%, y se encuentra en un proceso de incremento del tratamiento de aguas servidas, que hoy alcanza sólo al 3%.
Emos es controlada desde 1999 por un consorcio formado en partes iguales por la empresa española Sociedad de Aguas de Barcelona (Agbar) y la francesa Suez Lyonnaise des Eaux, empresas de larga experiencia en el sector sanitario y fuerte solvencia financiera.
Aguas Cordillera presta servicios de agua potable y alcantarillado a cerca de 85.000 clientes en las comunas de Vitacura, Lo Barnechea y Las Condes, en áreas colindantes a la concesión de su nueva matriz. En los sectores en que participa mantiene prácticamente un 100% de cobertura en agua potable y alcantarillado y el procesamiento de sus aguas servidas está entregado a Emos.
