SANTIAGO.- Un aporte de $ 3.700 millones destinará el gobierno para los Programas de Generación de Empleos a partir de enero del 2001, informó hoy el ministro del Trabajo, Ricardo Solari.
El secretario de Estado, quien además será el coordinador del proyecto, indicó que la principal innovación será aumentar la rentabilidad social de la iniciativa asociando la creación de puestos de trabajo de emergencia con una capacitación adecuada, especialmente en sectores vulnerables como jefas de hogar y jóvenes de escasos recursos.
En este sentido, precisó que hacia diciembre se realizará una evaluación del proceso completo de generación de empleos a través de los municipios, el cual presenta para los gobiernos comunales algunas dificultades en términos de inversiones adicionales para insumos, redestinación de personal para gestión del programa y en muchos casos, una demanda mayor que la oferta disponible.
Advirtió que si bien no se está descartando por anticipado el rol que puedan jugar los municipios en esta materia, "creemos que hay que hacer con ellos una evaluación al detalle del modo en que han realizado estas tareas".
"Tenemos que ver el modo de ir hacia una forma bastante más directa de colocación, tal vez mediante sistemas de subcontrato o medidas de esa naturaleza que vinculen mucho más directamente el desarrollo de estos programas con un incentivo a la colocación de las personas en puestos de trabajo estables", dijo Solari, añadiendo que "los esfuerzos de diseño, que deben culminar en diciembre, se están concentrando en establecer de qué manera estos programas no
sean iniciativas de transición que cubran un cierto evento sino que garanticen el acceso a empleos permanentes".
Sostuvo además que el desarrollo de esta iniciativa durante el 2001, no implica una visión pesimista de la evolución de las tasas de desempleo, ya que con independencia de ese indicador "en Chile han existido siempre esta clase de programas porque hay zonas del país que se deprimen más que otras, sectores productivos que entran en declinación a favor de otros que se expanden, y todo ello implica buscar el modo de cubrir los padecimientos de las familias".
Solari explicó que este programa, junto con iniciativas para potenciar la fiscalización del cumplimiento de la legislación laboral y previsional; ampliar la capacitación e incrementar la calidad de atención y la velocidad de procedimientos en la Superintendencia de Seguridad Social, especialmente respecto de las licencias médicas, "constituyen las prioridades de la cartera para el 2001, lo cual se refleja adecuadamente en la petición presupuestaria correspondiente".
