SEVEROMORSK.- La extracción de los cuerpos de los náufragos del "Kursk", de ser llevada a buen término antes del invierno, permitirá establecer las causas del naufragio del submarino ruso, estimaron expertos interrogados por la AFP en Severomorsk, base del Estado mayor de la Flota del Norte.
Los especialistas rusos no pierden la esperanza de ver la operación concluida con rapidez, pese a que la firma noruega Stolt Offshore, a la cual se dirigió Moscú, advirtió que la misma no podría ser emprendida antes de varios meses.
Sin embargo, "es muy importante que los cadáveres sean examinados por expertos médicos que puedan definir las causas exactas de la muerte de los marinos en cada uno de los nueve compartimentos del Kursk", estimó un responsable de la Fiscalía militar de la Flota del Norte.
Los médicos legistas podrán determinar en el caso de cada compartimento si los tripulantes murieron ahogados, por asfixia, de frío o por traumatismos sufridos durante el choque que padeció originariamente el Kursk durante una colisión, según la principal hipótesis de las autoridades rusas.
"La definición de las causas de la muerte de los marinos en cada compartimento permitirá descubrir cómo esos acontecimientos trágicos se desarrollaron a bordo del 'Kursk' y cuáles son las verdaderas causas del accidente", estimó el experto bajo cubierto del anonimato.
Si los cuerpos son recuperados de aquí a un mes todavía será posible identificarlos, señalaron los médicos del hospital militar de Severomorsk.
Esta fuente señaló que más allá de esa fecha, debido a los daños en la estructura del submarino, los peces, los cangrejos y los microorganismos marinos se apoderarán de los cuerpos con rapidez.
La operación debería comenzar a más tardar a principios de setiembre y terminar antes de las primeras tormentas, que empiezan a mediados de octubre en el mar de Barents.
El submarinista ruso Valeri Chernokozov, que trabajó durante 20 años en los servicios de salvamento de la Flota del Norte, opina que "para recuperar los cuerpos es necesario abrir aberturas de un metro cincuenta de lado para acceder a cada compartimento".
Según Chernokozov, estas aberturas implicarán para los submarinistas un trabajo de unas 24 horas en cada una de ellas.
Estas tareas deberán ser realizadas por buzos extranjeros, porque los rusos ya admitieron que no poseen los equipos necesarios para realizar trabajos de esta índole a más de 100 m de profundidad.
