MIAMI.- Los familiares del niño cubano Elián González no harán comentarios en público sobre una herencia de medio millón de dólares que dejó una religiosa de Oklahoma antes de suicidarse el mes pasado, afirmó su abogado en Miami.
Anne Katherine Abernathy, de 57 años, justo antes de suicidarse de un disparo en el pecho el pasado 20 de julio, cambió su testamento para dejar su fortuna a los parientes del pequeño balsero -a quienes nunca conoció- y a una familia de Massachusetts involucrada en un caso de abuso infantil.
Abernathy decidió quitarse la vida después de que su madre, de 91 años, muriera por causas naturales en una mansión que ambas compartían en la ciudad de Shawnee.
En su testamento original, Abernathy había dejado el dinero a doce familiares y amigos, entre ellos un tío y algunos primos, pero ante de suicidarse cambió de opinión.
De acuerdo con "The Miami Herald", en una nota de cuatro paginas borró a sus pariente del testamento e incluyó a la familias González y Amirault para repartirse el medio millón de dólares.
En la nota escrita poco antes de suicidarse la religiosa elogió a los familiares de Elián en Miami porque "lo trataron con tanto amor".
Tras el naufragio que se cobró la vida de su madre y de otros diez inmigrantes cubanos, los parientes del menor cuidaron al pequeño durante casi siete meses hasta que éste fue enviado, a la fuerza, junto a su padre, Juan Miguel González, quien regresó con él a Cuba.
Manny Díaz, abogado de la familia González, dijo a la prensa local que ésta no comentará el asunto en público.
Díaz, no obstante, reveló al Canal 51 de la cadena Telemundo que sus clientes han contratado un abogado en Oklahoma, donde los familiares de Abernathy, que fueron eliminados del testamento, están apelando el cambio en corte, aduciendo que ésta padecía problemas mentales.
La familia Amirault, que también fue incluida en el testamento, fue acusada en 1984 de violar y abusar sexualmente de varios niños en una guardería que tenían en Malden, en el estado de Massachusetts.
