DILI.- La ONU ha suspendido el plan de reducción de sus tropas en la región este de Timor Oriental debido al aumento de las infiltraciones y actividades de las milicias leales a Indonesia, confirmaron hoy viernes fuentes militares.
El portavoz de las fuerzas de paz de la ONU en Timor Oriental, coronel Brymjar Nymo, dijo a la prensa en Dili que dicha decisión se adoptó después de que la seguridad en el territorio, que hasta hace dos meses era de relativa calma, se deteriorase debido a las incursiones de las milicias.
Naciones Unidas tenía previsto retirar gradualmente antes del próximo enero 1.300 soldados de los 1.800 que hay desplegados en la región este, donde está la conflictiva frontera con la provincia indonesia de Nusa Tenggara.
"Emprenderemos de nuevo el plan de reducción cuando se solucione la situación derivada de la actividad de la milicia y el problema de los refugiados", dijo el noruego Nymo.
El problema de los refugiados y la porosidad de la frontera fueron los principales asuntos tratados ayer jueves en la reunión que mantuvo en Yakarta el presidente de Indonesia, Abdurrahman Wahid, con el jefe de la Administración Transitoria de Naciones Unidas para Timor Oriental (UNTAET), Sergio Vieira de Mello.
Indonesia se ha comprometido en reiteradas ocasiones a frenar las incursiones de las milicias en Timor Oriental y a desmantelar y repatriar a los alrededor de 100.000 timorenses que permanecen en campos de refugiados de Nusa Tenggara, aunque de momento no ha cumplido con ninguna de las dos promesas.
Los militares indonesios insisten en que las infiltraciones de las milicias responden a "invitaciones" con fines políticos realizadas por miembros del Consejo Nacional de la Resistencia Timorense (CNRT), con la finalidad de reforzar su poder dentro de la coalición.
El CNRT rechaza que existan escisiones en el seno de la coalición y niega que alguno de los grupos que la integran intenten conseguir el apoyo de las milicias pro indonesias.
El CNRT es una coalición de partidos políticos y grupos sociales formada para luchar contra Indonesia durante su ocupación de Timor Oriental, desde diciembre de 1975 hasta octubre de 1999.
Cuando se cumple el primer aniversario de la consulta del 30 de agosto de 1999, la ONU se siente preocupada por la escalada de los choques armados entre los milicianos y los cascos azules.
Hasta el momento, dos cascos azules han muerto, uno el pasado 24 de julio y otro el 11 de agosto, en emboscadas o tiroteos librados cerca de la frontera con los grupos paramilitares pro indonesios.
El portavoz militar dijo que el pasado día 28 una patrulla de cascos azules del destacamento australiano libró un tiroteo en el distrito de Maliana con dos milicianos armados con fusiles automáticos M-16, que escaparon entre la espesa vegetación de la zona.
Al día siguiente y en el mismo distrito, las tropas australianas avistaron otros dos milicianos que, según el coronel Nymo, "huyeron para reunirse con los seis u ocho grupos que operan en las montañas de esa área".
El alto mando de las fuerzas de paz calcula que a lo largo del último mes al menos 150 milicianos, y "posiblemente hasta 250", se han infiltrado en la región suroeste de Timor Oriental.
Las milicias, que se reagruparon en Nusa Tenggara tras la victoria independentista en el referéndum del año pasado, se cree que reciben adiestramiento y armamento de elementos nacionalistas pertenecientes a las Fuerzas Especiales indonesias (Kopassus).
A causa del deterioro de la seguridad en la frontera, el CNRT pidió esta semana a la ONU que extienda la presencia de sus tropas en Timor Oriental después del 2001 que es cuando UNTAET tiene previsto concluir su mandato para dar paso a la declaración de un Estado soberano.