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Vicepresidente peruano contempla renunciar ante llegada de Montesinos

Francisco Tudela señaló que "está ocurriendo algo que es muy malo para el Perú y yo voy a actuar en consecuencia. Ahora estoy reflexionando sobre eso (la posibilidad de renunciar) y tomaré una decisión en las próximas horas".

23 de Octubre de 2000 | 10:46 | Agencias
BOGOTA.- El vicepresidente peruano, Francisco Tudela, declaró este lunes a la radio colombiana Caracol que contempla la posibilidad de renunciar a su cargo debido a la situación planteada en su país por el regreso a Perú del ex jefe de facto de los servicios secretos, Vladimiro Montesinos.

"Está ocurriendo algo que es muy malo para el Perú y yo voy a actuar en consecuencia. Ahora estoy reflexionando sobre eso (la posibilidad de renunciar) y tomaré una decisión en las próximas horas", dijo Tudela en una declaración telefónica a Caracol.

Añadió que no ha dialogado sobre el sorpresivo retorno de Montesinos -quien se hallaba en Panamá- con el Presidente peruano, Alberto Fujimori.

"No tengo idea de cuál es la opinión del círculo interno del Palacio (de Gobierno) y la verdad quiere que le diga algo: no me interesa saberla tampoco", enfatizó Tudela.

Tudela dijo que "no se puede desarrollar una especie de sainete o broma del cual son víctimas 26 millones de personas (en Perú), (pues) un asilado que va y viene (por Montesinos), una persona controvertida, cuyas acciones han de alguna manera forzado moralmente el acortamiento del período del Presidente de la República, debería saber cuál es su lugar".

Fujimori, que ganó las elecciones presidenciales de julio pasado en medio de denuncias de fraude, anunció luego el recorte de su mandato y la convocatoria a nuevos comicios, tras descubrirse un esquema de corrupción que involucraba a Montesinos con un supuesto soborno a un legislador opositor, hecho que provocó una crisis política sin precedentes en el país.

Montesinos llegó sorpresivamente en la madrugada de este lunes a la base aérea de Pisco, 250 km al sur de Lima, procedente de Ciudad de Panamá y Guayaquil (Ecuador).

La nave del ex asesor de Fujimori aterrizó hacia las 05H30 locales (10H30 GMT), un mes después que Montesinos partiera furtivamente a Panamá, país donde había solicitado asilo territorial tras verse involucrado en el caso de presunto soborno.

"A mí, como Francisco Tudela, me causa indignación este juego con el país, e independientemente de mi condición de vicepresidente no se me ha consultado ni he estado informado sobre ninguno de estos desarrollos", dijo el funcionario peruano a Caracol.

Según Tudela, lo que está ocurriendo en Perú "es la culminación de un proceso que se ha venido desarrollando durante el fin de semana, en el cual ha habido un comunicado de generales, que son los ministros de Defensa y el Interior, una línea que encuentro yo que es inconstitucional, y simultáneamente el condicionamiento del proceso electoral a una amnistía general".

"Yo no estoy en contra de una amnistía -que por cierto no puede incluir el delito común-, pero esa amnistía tiene que ser una negociación autónoma de las elecciones. Quien pretende hacer un trueque de democracia por amnistía ya está mostrando lo que vale la democracia para él", afirmó.

Tudela se refería a un comunicado difundido el sábado por las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional peruanas, en el cual consideraron que la amnistía dictada en 1995 "resulta insufuciente para garantizar que sus efectivos no sean víctimas de represalias que pretenden desatar algunas instituciones, resentidas por el resultado obtenido en la lucha antisubversiva".

El pronunciamiento de los mandos militares ahondó la sensación de polarización que se vive en Perú y aumentó las tensiones entre gobierno y oposición que participan en la mesa de diálogo, auspiciada por la OEA, y que podría sufrir un nuevo tropiezo en su camino de encontrar consensos hacia las nuevas elecciones generales.

Las diferentes fuerzas de oposición han declarado que la demanda de una nueva ley de amnistía es inaceptable y consideran que el gobierno del Presidente Fujimori pretende condicionar la realización de las elecciones a la impunidad para los militares.