EFE
CARACAS.- La oposición venezolana rechazó hoy en bloque las acusaciones del oficialismo de haber incurrido en actos de corrupción y consideró que las denuncias buscan mermar su unidad interna.
La denuncia fue hecha originalmente el martes por el presidente de la Asamblea Nacional (Congreso unicameral), el oficialista Diosdado Cabello, quien acusó a los parlamentarios opositores del partido Primero Justicia (PJ) Richard Mardo y Gustavo Marcano de haber recibido cheques de una empresa privada para financiar sus campañas.
Mardo replicó señalando que el diputado William Ojeda, quien fue electo por la oposición pero se pasó al oficialismo el año pasado, fue el que "por órdenes" de Cabello lo buscó para intentar infructuosamente comprar su conciencia.
"En días pasados, el señor Diosdado por medio del diputado talanquera (Ojeda) me buscaron para prestarme para una vagabundería en contra de la unidad (opositora) (...) Y me dijeron que podían congelar todas ollas (acusaciones falsas) que estaban montándome sólo si yo me paraba en la Asamblea Nacional a hablar del partido PJ y del ex candidato presidencial, Henrique Capriles Radonski", denunció Mardo en rueda de prensa.
"No lograron comprarme, no lograron quebrarme las patas, no lograron doblegarme y yo mantuve una conducta firme porque lo que tengo en la vida es una conciencia tranquila", agregó Mardo, quien acusó a Cabello y los oficialistas de haber manipulado la evidencia para crear un caso.
Mardo indicó que los cheques en cuestión existieron pero que fueron usados para obras de beneficencia del estado Aragua, donde reside.
Cabello había solicitado a la Comisión de Contraloría del Parlamento que iniciara una investigación. El presidente de esta instancia, el oficialista Pedro Carreño, secundó la denuncia contra los diputados del partido Primero Justicia (PJ) y se presentó hoy ante la fiscalía para solicitar la apertura de una investigación.
Carreño dijo que los opositores admitieron de forma implícita haber cometido un acto de corrupción, un delito que no prescribe según la Constitución venezolana.
"(Mardo) manifiesta para qué eran los cheques, eso lleva implícito una confesión de un delito de corrupción contra el patrimonio público, y el otro parlamentario durante su intervención el día de ayer admite los hechos diciendo que es cosa juzgada, obviando que los delitos contra el patrimonio público no prescriben", explicó Carreño.
El ex candidato presidencial Henrique Capriles Radonski recalcó que la maniobra del oficialismo apuntaba contra él con el objetivo de "generar miedo", así como dificultar la financiación de la oposición.
"Yo entiendo cuál es la intención que hay detrás. Que como nosotros no utilizamos los fondos públicos para nuestras actividades políticas, ni nosotros le metemos la mano al erario público para hacer política, aquí no tengamos a nadie dispuesto a ayudarnos", advirtió Capriles, derrotado el 7 de octubre en la contienda presidencial por el mandatario Hugo Chávez, quien se encuentra en Cuba tratándose de un cáncer.
Mardo apuntó que los intentos de comprarlo por parte del oficialismo estaban condenados al fracaso porque no se atrevería a hablar mal de Capriles Radonski o del secretario general de PJ, Julio Borges.
"La dignidad vale más que cualquier cifra que me hubiesen ofrecido. Yo no me podía ayer haber parado en la Asamblea (Nacional) a hablar mal de Julio o de Henrique cuando conozco sus trayectorias", dijo.
Por su parte, Borges aseguró que "el gobierno lo que hace es corromper a la gente con dinero", lo que provocó que el parlamentario Hernán Núñez abandonara recientemente la oposición.
"Mardo lo mandó largo (a Ojeda), tú sabes para dónde, pero el otro diputado Hernán Núñez lamentablemente sí se prestó a ese juego y se pasó al gobierno", lamentó Borges.