MADRID.- Un insólito suceso tuvo lugar esta noche en medios de los festejos del Real Madrid tras ganar la tan ansiada Copa del Rey .
Ocurre habitualmente que tras conseguir logros los jugadores se "tomen" licencias y brinden quizás un poco más de la cuenta. Sino, pregúntenle a Sergio Ramos, defensor madridista que al parecer se "tomó" el hecho muy a pecho.
Tras ser uno de los baluartes del cuadro de Mourinho en el 1-0 ante el Barcelona, el defensor comandó los festejos en el tradicional paseo que brindan los triunfadores por el centro de Madrid.
Sucede que al llegar al puente de Cibeles, Ramos perdió el control de la Copa y se le cayó ante la mirada atónita de los miles de hichas locales. La imagen habla por si sola: el trofeo quedó destrozado, consigna el diario Marca .
Sin embargo a los jugadores poco pareció importarles. Ellos, en la suya, continuaron sus celebraciones como si nada hubiera pasado. Y algo de razón tenían, ya que el trofeo volvía a ser del cuadro merengue tras 18 años.