SAO PAULO.- Óleo e Gás Participações S.A, la petrolera en bancarrota controlada por el millonario brasileño Eike Batista, acordó con acreedores postergar la presentación de un plan de reestructuración hasta el 31 de enero, mientras intenta obtener nuevo financiamiento, anunció la firma a través de un comunicado.
Óleo e Gás, que cayó en quiebra durante el colapso del imperio empresarial de Batista el año pasado, y sus acreedores estaban discutiendo términos de una potencial operación de financiamiento de los acreedores por US$ 200 millones, dijeron más temprano dos fuentes a la prensa internacional.
La compañía tenía fondos suficientes para mantenerse a flote y la postergación no complicaría las operaciones, según las fuentes, que no quisieron ser identificadas. Se esperaba que la firma presentara sus planes de reestructuración a los acreedores este viernes.
En el comunicado, la empresa dijo que acordó con los tenedores de bonos retrasar en una semana la presentación del plan de reestructuración y la firma del préstamo de financiamiento de los acreedores.
Los administradores de Óleo e Gás quieren convencer a la mayor cantidad de acreedores para que respalden el plan de reestructuración, que debe ser presentado ante un tribunal de quiebras brasileño, dijo la primera fuente.
Óleo e Gás, anteriormente conocida como OGX Petróleo e Gas Participações SA, adeuda unos US$ 5.100 millones a inversores como el fondo de bonos Pimco, proveedores como Schlumberger NV, y a su filial y constructora naval OSX Brasil SA.
Sus bonos y acciones cayeron el viernes, una señal de que los inversores temen que el acuerdo con los acreedores podría demorarse.
Sus acciones cedieron un 8,6% a 0,32 reales. Sin embargo, los títulos han escalado un 33% este año, después de haberse hundido un 95% de su valor en el 2013.
El ex magnate Batista, quien también controla OSX, padeció el colapso de su imperio de compañías industriales y de materias primas el año pasado en medio de una montaña de deudas, luego de que una decepcionante producción en sus yacimientos petroleros alejó a los inversores.
Una vez que Óleo e Gás presente el plan de reestructuración ante el tribunal de quiebras, los acreedores tendrán entre 30 y 60 días para apoyarlo o rechazarlo.
