Los diálogos sociales ya terminaron y comenzó la cuenta regresiva para que el Gobierno presente lo que será su proyecto de reforma tributaria, un tema prioritario para la administración de Gabriel Boric y que ha despertado una importante expectación en los mercados y en la ciudadanía en general.
Tal y como lo han reiterado en varias ocasiones distintas voces del Ejecutivo, la reforma será presentada en su conjunto el próximo 30 de junio y su tramitación -que iniciará en la Cámara de Diputados- se llevará a cabo a través de distintos proyectos.
"Va a ver un proyecto que va a incluir todos los temas de impuestos a la renta, evasión y elusión. Por otro lado, vamos a tener un proyecto sobre royalty minero y, un poco más adelante, vamos a tener los proyectos correctivos, incluyendo impuestos verdes y también un proyecto de ley de rentas regionales", detalló este viernes el ministro de Hacienda,
Mario Marcel, quien, en medio de una ceremonia, hizo entrega de los resultados de los diálogos sociales al Presidente,
Gabriel Boric.
Dicho proceso de diálogos sociales inició el pasado 19 de abril y culminó el 4 de junio. Se realizaron un total de 93 actividades: 75 audiencias públicas en cuatro regiones del país, 17 encuentros ciudadanos en las capitales regionales de todo Chile y 1 encuentro ciudadano virtual con participantes de distintos lugares.
Mediante este proceso, se escuchó a a 75 expertos, equipos de especialistas o representantes de organizaciones que entregaron propuestas específicas, 460 representantes de organizaciones sociales o personas naturales que participaron en encuentros ciudadanos en representación de 181 organizaciones sociales, más 150 representantes de organizaciones o personas naturales, de manera telemática.
"Esta es la primera oportunidad en que una reforma tributaria va precedida de un proceso de diálogo con distintos actores, un diálogo abierto y transparente", resaltó Marcel. "Debiera llevarnos a un sistema tributario que sea capaz de perdurar en el tiempo y que transcienda al actual Gobierno" y terminar con "los vaivenes tributarios" de la historia reciente de Chile", agregó el jefe de la billetera fiscal.
Según comentó el ministro, los principales resultados de este proceso de diálogos se sintetizaron en ocho principios "que deberían sustentar cualquier régimen de tributación, independiente de quién esté habitando en La Moneda o de quién tenga representación en el Parlamento".
Los ocho principios para un sistema tributario
El primero, detallaron desde el Ministerio de Hacienda, tiene que ver con "progresividad y equidad".
"Lo primero se refiere a que la tasa de impuestos aumente a medida que se incrementa el patrimonio, y que las exenciones estén debidamente justificadas ya sea por razones económicas o de interés social. Mientras que lo segundo se asocia con el hecho de que similares transacciones o niveles de renta, el tratamiento tributario sea el mismo, también en los diálogos se percibió que el concepto de equidad está ligado con la dimensión territorial", indicó Hacienda.
Un segundo principio dice relación con "transparencia y eficiencia", en el sentido de reforzar la obligación del Estado de "disponer de mecanismos de información evaluación y rendición de cuentas para que las personas conozcan el destino de la recaudación. Los ciudadanos aspiran a ver un mejoramiento en sus condiciones de vida a cambio de su contribución impositiva".
Una tercera prioridad es el "compromiso con el cumplimiento tributario", en ese sentido, explicó la cartera, "prácticas como la evasión y la elusión de impuestos son mal evaluadas por la ciudadanía en general".
"Se detectó una sensación generalizada de que es un 'comportamiento repudiable', con varias implicancias: reduce los recursos para el financiamiento de programas y atenta contra la igualdad ante la ley, pues crea ventajas económicas a quienes usan estas prácticas en detrimento de quienes cumplen debidamente con su responsabilidad tributaria", añadió.
Otro principio tiene que ver con la
"simplicidad", en línea con "facilitar el entendimiento del aporte que debe realizar cada contribuyente. Comprender y poder proyectar el monto de los impuestos se asocia con menos horas y costos administrativos en declarar los impuestos, y por el lado del Estado en reducir la complejidad de la fiscalización", apuntó Hacienda.
"Educación y asistencia al contribuyente", aparece en quinto lugar. "Existe un genuino interés de los contribuyentes por contar con más información, formación, y orientación sobre el pago de impuestos", lo que "abre un desafío para el estado pues implica que el sistema tributario debería repensar continuamente las herramientas que pone a disposición de los habitantes".
En tanto, la "corresponsabilidad", es el sexto principio. Ante ello, la cartera liderada por Marcel expuso que ""cualquier sistema tributario contiene obligaciones para todos los actores. Se entiende que esta es la forma en que los ciudadanos se vinculan con el Estado y son co-partícipes y co-responsables de los bienes y servicios que dispone el Estado para mejorar la calidad de vida".
También se identificó la "certeza y estabilidad" como un componente clave dentro de un sistema tributaria, lo que evita "movimientos o interpretaciones que podrían ser contradictorias dentro de periodos breves".
El octavo y último principio identificado en estos diálogos es la "adaptabilidad". "Los asistentes a los diálogos mencionan que los tributos se deben ir reforzando o modificando a medida que el país o las sociedades van evolucionando", señaló.
No obstante, concluyó Hacienda, "se recomienda que las reformas consideren la evidencia nacional e internacional, y recurran a los tipos de impuestos y mecanismos que se utilizan en los países desarrollados o que se discuten a nivel internacional".