Con un aplastante respaldo de parte de los socios del sindicato N°1 de Minera Escondida, ayer se confirmó la paralización de la faena minera más grande del mundo, ante las supuestas dificultades en temas de seguridad que estaría enfrentando la mina, lo que, en todo caso, fue descartado por la compañía. Por eso, la empresa decidió recurrir a los tribunales, en donde presentó una demanda de mera certeza, con la que busca que sea un juez quien determine si existen o no los incumplimientos que reclama el sindicato respecto del contrato colectivo. Con -según conocedores de la situación- la firma busca demostrar que se encuentra cumpliendo con sus obligaciones laborales y que los tribunales de justicia actúen si corresponde.
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