Una encuesta realizada por el Centro de Políticas Públicas de la Facultad de Economía y Gobierno de la Universidad San Sebastián (USS), da cuenta de que tres de cada cuatro personas en Chile consideran que la sostenibilidad es un tema muy importante, mientras que el 91,3% cree que todos somos responsables de ella.
Sin embargo, la percepción sobre el desempeño de las empresas en este ámbito dista de las expectativas. Según el estudio, las compañías fueron calificadas con un promedio de 3,7 a nivel nacional, 3,4 a nivel regional y solo 3,2 a nivel comunal, en una escala de 1 a 7.
Expectativas versus realidad
La brecha entre lo que espera la ciudadanía y lo que percibe que hacen las empresas es significativa. Los encuestados identifican como prioridades reducir la contaminación que afecta a la salud de las personas (17,4%) y promover un trabajo digno, seguro y sin discriminación (17,3%). No obstante, creen que las empresas priorizan otras acciones como la reutilización y reciclaje de residuos (15,4%) y mejorar la calidad de vida de sus clientes y usuarios (13,6%).
“Los resultados de la encuesta evidencian una desalineación entre las necesidades de la población y lo que perciben de su accionar. Esto podemos apreciarlo al ver que las dos principales acciones que la gente espera del mundo empresarial se ubican en el cuarto y quinto lugar en el listado de lo que consideran como las prioridades de ese sector”.
Felipe Bettancourt, coordinador de Impacto Social del Centro de Políticas Públicas de la USS
Entre las acciones concretas que las personas consideran fundamentales se destacan el uso de energías renovables (45,5%), la transparencia y reporte de acciones de sostenibilidad (30%), el reciclaje de residuos (24,9%) y la conservación de hábitats y ecosistemas (21,4%).
Obstáculos y soluciones
La encuesta también consultó sobre las barreras que enfrentan las empresas para avanzar en sostenibilidad. El 30% de los encuestados considera que el principal obstáculo son los costos asociados a la implementación, seguido por la falta de conocimiento (12,7%) y los largos tiempos de tramitación de permisos estatales (12,4%).
Respecto a las soluciones, el 32,4% de las personas cree que el Estado debiera promover incentivos tributarios para fomentar prácticas sostenibles. Otro 30,7% apunta a la necesidad de mayor claridad en la regulación, mientras que el 16% sugiere financiar directamente a las empresas a través de subsidios o créditos.
Compromiso individual
El estudio también evidencia que la ciudadanía está dispuesta a aportar desde su propio ámbito. Casi la mitad de los encuestados afirma estar muy dispuesta (12%) o bastante dispuesta (35,4%) a pagar un precio más alto por productos o servicios sostenibles, aunque un 21,9% declara estar poco o nada dispuesto a hacerlo.
Las acciones personales más frecuentes incluyen apagar las luces al salir de una habitación (77,8%), tomar duchas cortas para ahorrar agua (40%) y reciclar periódicos, vidrios y otros artículos (37,3%).
