La crisis institucional y financiera que afecta al Club de la Unión, emblemática entidad de Santiago fundada en 1864, entró en una nueva fase esta semana tras la decisión del Tribunal Constitucional (TC) de admitir a trámite dos recursos de inaplicabilidad por inconstitucionalidad presentados por la administración del club.
Las acciones buscan frenar el proceso de liquidación decretado hace poco más de una semana por el 28° Juzgado Civil de Santiago, y han tenido efecto inmediato: la liquidación queda suspendida por tiempo indefinido mientras el TC analiza los antecedentes.
La medida del TC implica que se paraliza la disolución forzada del Club y entrega a sus administradores una ventana de tiempo para insistir en el proceso de reorganización judicial, el que permitiría servir los pasivos de la institución.
Desde el Club han venido impulsando diversas acciones legales en esa línea, buscando revertir la decisión de primera instancia. Sin embargo, la liquidación se dictó luego de que un grupo de más de 20 trabajadores, con remuneraciones y cotizaciones impagas, presentaran una solicitud argumentando que no habían sido incluidos como acreedores.
En paralelo, la sociedad Unión Inmobiliaria S.A., propietaria del edificio que alberga al Club —ubicado en el corazón de Santiago— y del valioso patrimonio artístico que en él se conserva, anunció una subasta pública de parte de esa colección. El remate está programado para el próximo 7 de junio, en plena vigencia de la suspensión decretada por el TC.
Desde el Club han sostenido que ni el edificio ni las obras de arte están consideradas como activos en el proceso de liquidación, ya que el inmueble se encuentra en régimen de comodato. En ese contexto, han advertido que lo único susceptible de ser liquidado serían algunos bienes menores como muebles de cocina y cuchillería, lo que contrasta fuertemente con los $800 millones que reclaman los trabajadores.
No obstante, en el catálogo de la subasta se explica que "este encargo de la Sociedad Unión Inmobiliaria S.A. responde a la necesidad de generar recursos para enfrentar compromisos financieros derivados del Club de la Unión", lo que sugiere que el remate busca cubrir deudas ligadas directamente a la operación del Club.
La subasta está siendo organizada por la firma Monge y Cía., Arte y Patrimonio, vinculada a Francisco Monge.
A través de sus redes sociales, la casa de remates informó: "Subastaremos parte de la excepcional colección de arte del edificio y pintura de destacados artistas contemporáneos que se daría durante 150 años ha formado parte del patrimonio cultural e histórico que hoy alberga el Club de la Unión".
En el mismo posteo de Instagram, se añade: "Abriremos las puertas de esta excepcional exposición este sábado 31 de mayo y estaremos hasta el viernes 6 de junio recibiendo visitas (domingo 31 de mayo, también estaremos atendiendo)". La muestra será abierta al público en horario continuado de 10:00 a 17:00 horas.
"Las visitas son sin previa inscripción, pero el requisito para ingresar es registrarse en la entrada. Atención: ya publicamos en nuestra página web el catálogo con una muestra de lo que será esta subasta", informan desde la casa de remates.
En su sitio web, Monge y Cía. agrega que el lunes 2 de junio se publicará el catálogo completo, con cerca de 300 objetos y sus respectivos precios base. Entre los bienes ofrecidos destacan "importantes obras de arte, pintura nacional y europea, arte decorativa que ha formado parte del alojamiento por más de 100 años de las dependencias del prestigioso Club de la Unión".